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Aleix Vidal, el renacido

El Renacido, The Revenant, fue la película que alzó a Leonardo Di Caprio al Olimpo de los dioses de la cinematografía con un Óscar. El niño que nos hizo llorar en Titanic, el hombre consagrado que rozó la estatuilla dorada por El Aviador, Diamante de Sangre y El lobo de Wall Street. Cuando todo parecía perdido, que nunca lo iba a conseguir, que pasaría a la historia como el eterno aspirante, el injusto perdedor, llegó El Renacido y se lo otorgó. Ahora el renacido es otro.

Aleix Vidal se dio a conocer en Primera División como un extremo con gran desborde y capacidad de sacrificio en el Almería en la temporada 2013/14. El conjunto andaluz se salvó in extremis pero al catalán le llegó la gran oportunidad de su vida con una oferta del Sevilla. Sus características como futbolista encajaban a la perfección con la idiosincrasia de Unai Emery como entrenador y su futuro en Nervión se presumía fantástico.

Sin embargo le costó entrar en el equipo. La elevada competencia en el volante derecho, las lesiones y la falta de contundencia defensiva hicieron que Unai retrasara la posición de Aleix al lateral derecho. Y allí se hizo un nombre nacional e internacional como futbolista. El catalán fue una pieza fundamental en la Europa League conseguida por el combinado sevillista, la segunda consecutiva, con una actuación especialmente destacada en las semifinales ante la Fiorentina.

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Aleix jugó aquella final europea ante el Dnipro con la dura función de frenar a Yevhen Konoplyanka, el Sevilla repitió título, y el nuevo lateral tuvo un doble premio a final de dicha temporada: su debut con la Selección Española y su fichaje por el Fútbol Club Barcelona como sustituto, en un futuro muy cercano, de Dani Alves. Todo le sonreía a Aleix, esta película parecía tener solo un final posible, un final feliz.

Pero como toda buena película, siempre hay un momento en el que todo parece venirse abajo. Una situación complicada de la que solo los verdaderos héroes son capaces de salir victoriosos. Aleix tuvo que esperar seis meses para debutar con el Barça por culpa de la sanción de la FIFA y la temporada 2015/16 prácticamente quedó reducida a apenas cinco encuentros sueltos. Un problema de adaptación, de falta de tiempo material y que Dani Alves, por muchos años que pasen, siempre será Dani Alves.

La 16/17 debería ser su punto de inflexión. Dani se fue a la Juventus tras su último trabajo para el Barça, un favor personal de un año de duración. Y su sombra es muy alargada, pero Aleix estaba preparaado. O eso creía. Porque Luis Enrique no opinaba así y optó por Sergi Roberto en el lateral derecho a pesar de no haber jugado nunca. Y si Sergi no estaba o tenía que descansar, defensa de tres centrales o Mascherano en el flanco derecho. Aleix con contaba, no iba ni convocado, parecía no existir. Estaba más fuera que dentro pero de repente, como buen héroe, llegó su oportunidad y la aprovechó. Ha dado un paso al frente. Ahora ya cuenta, ha encadenado varios partidos, conseguido el perdón de Lucho y refrendado su buen trabajo con goles. Todo llega para quien sabe esperar, dicen, y Aleix Vidal es el nuevo renacido. Como Di Caprio, que parecía que nunca ganaría su Óscar, Aleix ya tiene su sitio en el Barça. Próximo objetivo, la titularidad.

1994. Tanos, Cantabria. Estudiante de periodismo. @SpheraSports y @FCBsphera “Esa melancolía irremediable que todos sentimos después del amor y al fin del partido”.

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