Con partidos de semejante calibre, Italia se para. Más aún se paraliza si condimentas un partido de altos vuelos con un aliciente como el reencuentro de Gonzalo Higuaín con sus antiguos compañeros. Cuatro puntos separan a Juventus y Napoli en lo alto de la clasificación. Para los bianconeri no estará Dybala, baja importante la del jugador argentino. En cambio, el Napoli no podrá contar con ninguno de sus delanteros; Milik (lesionado) y Gabbiadini (sancionado) por lo que Sarri deberá de optar con Mertens o Callejón como falso 9.
Allegri lo tiene claro, el partido de mañana será de altos vuelos pero no decisivo para el campeonato. El mismo entrenador pone de ejemplo, la derrota ante el Sassuolo por estas fechas la pasada temporada. La Juventus se juega mucho esta semana. Napoli y Lyon, uno para seguir comandando en lo alto del Calcio y el otro para marcar diferencias respecto a su perseguidor, el Sevilla de Jorge Sampaoli en el Grupo H de la Champions League. Higuaín ha hecho trabajo diferenciado estos días por lo que el entrenador pone en duda su participación en el partido.
El partido será una batalla. Los napolitanos siempre tienen ganas de más, una particular venganza ante su antiguo héroe y nunca viene de más, vencer en Turín. Para los juventinos, de ganar supondría un golpe en la clasificación siempre además de dejar al equipo de Sarri con la moral por los suelos. Napoli querrá el balón, Juventus suele tener el balón por lo que la pelea del mediocampo se antoja esencial. Clave o no si será titular Claudio Marchisio, después de tener minutos la pasada jornada. De todos modos, Allegri quiere tres en el medio campo y lo que está claro es que uno será, el bosnio Miralem Pjanić.
Miralem no ha empezado bien. Ha sido regista por urgencia con la baja de Marchisio y nunca se ha sentido cómodo hasta la fecha dentro de las órdenes de Allegri. Pese a ello, gol y asistencia en la última jornada ante la Sampdoria se suman a un total de tres goles y cuatro asistencias en lo que llevamos de temporada. Su calidad por ahora raspa el aprobado. Sus dos últimos años en Roma demuestan del potencial del jugador. Liberado como interior al lado de un regista, el bosnio tiene un guante para asistir a sus compañeros. Clave en el juego posicional y un maestro en las jugadas a balón parado. Está llamado a ser la brújula de la Juventus en los próximos años.
En el Napoli cuentan con un jugador de sangre azul. Eslovaco de nacimiento, lleva cresta y un total de 10 años vistiendo la camiseta azzurra. Más de 400 partidos y ya ha superado a Maradona con sus goles en Serie A. Marek Hamsik se siente napolitano y así lo hace saber cada vez que se lo preguntan. Es el símbolo de toda una ciudad y el faro de un equipo que siempre mira hacia arriba. El proyecto de Maurízio Sarri no se entiende sin la pausa y el orden de Marek desde el interior izquierdo. Su cambio de posición con la llegada del toscano ha supuesto la mejor versión del eslovaco y con ello, el mejor juego que se le recuerda al Napoli con balón. Desaparecido en ocasiones y no tan regular como quisiéramos, la buena versión de Hamsik puede ser determinante para el resultado final en Turín.
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