Meritorio tercer puesto de Carlos Sainz en lo que supone el 19º podium de su carrera. Max Verstappen y Red Bull volvieron a subirse a lo más alto del podio una vez más. En la vida todo tiene un principio y un final, pero parece que este deporte ha entrado en un bucle.
Si a este texto se le pudiese dotar de música, probablemente la empezaría como termina casi cada Gran Premio de la Fórmula 1: con el Het Wilhelmus y el Bundeshymne. Ambas letras son el himno nacional de Países Bajos y el de Austria, respectivamente. Y es que tras la primera carrera de la temporada en Bahréin, ambos himnos volvieron a sonar, otra vez.
Aún es temprano para vaticinar cómo será esta nueva temporada de Fórmula 1, pero este primer fin de semana ha podido dar grandes muestras de dónde está cada escudería, al menos a corto plazo. Desde la persistente dominancia de los Red Bull a la increíble y quizás algo esperada caída de Alpine.
Para empezar, Max Verstappen consiguió su quinto ‘Grand Chelem’, que consiste en hacer la pole, ganar la carrera, hacer la vuelta rápida y liderar todas las vueltas de la carrera. Tan solo 26 pilotos lo han logrado, y Max es el tercero que más veces lo ha hecho, solo por detrás de Hamilton (6) y Jim Clark (8). En segunda posición quedó su compañero, Checo Pérez, pero el atisbo de esperanza está en el tercer escalón del podio, pues Carlos Sainz terminó a poco más de dos segundos y medio del mexicano. Muy poca diferencia si la comparamos con los más de 25 segundos que le sacó Pérez el año pasado, también segundo clasificado, a Fernando Alonso, que quedó tercero.
Del tercer puesto al octavo, tan solo hubo 25 segundos de diferencia. Y entre estos puestos están los Ferrari, los Mercedes y los McLaren. Leclerc presentó problemas desde el comienzo de la carrera con la temperatura de los frenos: “El equipo me dijo por radio que había más de 100 grados de separación entre la parte delantera derecha y la delantera izquierda, lo que es mucho”. Sin ese contratiempo, probablemente la lucha con Sainz hubiera sido mucho más intensa.
Justo por detrás de la escudería italiana parece que se asoma Mercedes y McLaren. Tan solo 10 segundos de diferencia entre Russell, que quedó quinto, y Piastri, que terminó en la octava posición.
Y ya para cerrar las posiciones que otorgan puntos, estaban los Aston Martin, lejos de los resultados que obtuvieron el año pasado, que sumaron 23 puntos, no como en esta carrera, que han sumado tres. Alonso dijo que iba a finalizar noveno y así lo hizo, mientras que Stroll cruzó la línea de meta en décima posición. Pero es difícil asegurar que esto terminará así.
En 2023, parecía que Aston Martin iba a ser la segunda mejor escudería de la temporada y, finalmente terminaron quintos en el mundial de constructores. No porque su rendimiento decayera a mitades del calendario, sino porque sus perseguidores mejoraron sustancialmente sus monoplazas. Esto es algo que deberá hacer el equipo de Aston Martin si quieren aspirar a más este año, aunque no debería ser muy preocupante, pues Pedro de la Rosa, embajador de la escudería británica, dijo tras finalizar la carrera que “hay es un plan de mejoras bastante claro. Tenemos ya varios saltos previstos a lo largo de la temporada”. Por cierto, el expiloto español mantendrá, al menos un año más, la vuelta rápida en el circuito de Sakhir.
Fuera de los puntos, es bastante más complicado poder adivinar dónde está cada equipo. Cada escudería presentó sus problemas, aunque curiosamente, no abandonó ningún piloto. De hecho, es la primera vez en la historia de la Fórmula 1 que todos los pilotos finalizan la primera carrera del calendario. Pero bueno, a lo que íbamos. Cada equipo tuvo sus más y sus menos.
Williams tuvo problemas que se vieron reflejados en la nueva pantalla que incorporaron al volante. Al parecer, el balance de frenada de Logan Sargeant se volvió ‘loco’, mientras que a Albon le apareció el siguiente mensaje, también en su volante: “car too hot”.
Visa Cash Up RB (Toro Rosso) tuvo problemas entre sus dos pilotos: discusiones por posiciones que no daban puntos, pero supongo que el ego de los pilotos a veces está por encima de los intereses de los equipos, ya que protagonizaron un adelantamiento que les podría haber costado la carrera y alguno que otro millón de euros en reparaciones.
Los Haas y los Sauber (o Stake o Kick, ya nadie sabe como se llaman) no hicieron nada fuera de lo común. Para empezar, Nico Hülkenberg, piloto de la escudería estadounidense, partió desde la décima posición, pero un toque con Stroll en la salida hizo que finalmente terminara en el decimosexto lugar, mientras que Bottas, piloto de Sauber, hizo una parada en boxes de 52 segundos. Muchísimo tiempo, ya que las paradas rondan habitualmente los dos segundos y medio, pero hay que recalcar que el piloto finlandés ya tiene el récord de la parada más larga de la historia, y dudo mucho que alguien la supere: 43 horas y 15 minutos. Pero ese es otro tema.
Y finalmente están los Alpine, que ya se esperaba que decayeran en esta temporada, pero quizás no tanto. Clasificaron en el último y penúltimo puesto y finalizaron la carrera en el puesto 17 y 18 después de la salida de pista de Sargeant y la mala parada de Bottas. Y es que la escudería francesa presenta varios problemas. Tienen sobrepeso en su monoplaza aun no habiendo pintado prácticamente el coche y además, también tienen problemas con la refrigeración del coche, tanto que durante la clasificación, varios mecánicos de Red Bull tuvieron que ayudar a refrigerar el coche de Ocón. A todo esto hay que sumar las dimisiones de Matt Harman, director técnico del equipo, y de Dirk de Beer, responsable de aerodinámica. Al parecer, ambos presentaron su dimisión el mes pasado y se cree que no se hará efectiva hasta el mes de abril.
En definitiva, estás son algunas de las conclusiones que se pueden sacar, quizás algunas de forma precipitada, tras la primera carrera de la temporada. Max Verstappen y Red Bull siguen liderando, Ferrari parece que es el segundo equipo, Aston Martin tendrá que traer mejoras si Alonso quiere conseguir su ansiada 33 y a los Alpine se les vaticina la peor o una de sus peores temporadas en la historia de este deporte. Pero yo no tengo la verdad absoluta y todo esto puede variar a lo largo de las próximas 23 carreras. Aunque creáis que miento o caigo en un tópico, la Fórmula 1 puede seguir sorprendiendo.
