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Celta

Problemas en Casa Celta

El Celta no está bien. Varios problemas atormentan la casa del ‘Rey de Galicia’ y mantiene al equipo en la zona baja de la tabla, bailando con los puestos de descenso en los que, a estas alturas de la competición, hay una igualdad extrema. Tras el empate 1-1 contra el Getafe, el Celta se mantiene 13º en la clasificación, pero a tan solo dos puntos de la zona de quema. Además, uno de los equipos que tiene por debajo es el Sevilla, uno habitual en la zona alta de la tabla y que no creo que tarde demasiado en salir de ahí abajo.

Año tras año hay dos factores que no logro conectar en los objetivos del Celta en cada temporada. El primero es que, habitualmente, tienen una plantilla de mucha calidad. Jugadores de alto nivel, nombres importantes y un estilo de juego que les favorece. El segundo es que, pese a ello, el objetivo principal es la salvación. Para un equipo como el de Vigo esto debe ser así, y que todo lo que venga a partir de los 35-40 puntos bienvenido sea. Son dos cosas de las que soy consciente pero siendo la primera un hecho, ¿por qué cuesta tanto la segunda? La única excepción fue la temporada 20/21, temporada en la que se salvaron por 19 puntos, quedaron 8º y a tan solo 5 puntos de Europa, pues era el primer año que el 7º puesto otorgaba plaza para la Conference League.

Anoche, tras empatar agónicamente en casa contra el Getafe (gol de Aidoo en el 89′), le preguntaron a Iago Aspas, líder indiscutible de este equipo, cuáles eran los problemas del equipo. El de Moaña respondió con lo que muchos pensamos: falta Denis. Por supuesto no lo dijo así, pero dijo algo como que el equipo perdió calidad y que faltaba un jugador en el mediocampo que diese ese último/penúltimo pase diferencial, esos de los que valen dinero de verdad. Es evidente que se refiere a la problemática con Denis, que sigue formando parte de la plantilla del equipo pero que no es convocado por órdenes de Carlos Mouriño, presidente del club. Esa tarea se le encomendó a Óscar Rodríguez, pero por ahora no está siendo capaz de cumplir las expectativas. Si bien es difícil sustituir a Denis Suárez, la verdad es que Óscar está muy lejos de llegar a su nivel en el estado de forma actual.

Como pasa muchas veces en el fútbol, ya hay rumores sobre la posible destitución de Coudet. Incluso he leído que ya a principio de temporada se pactó con el entrenador argentino que esta sería su última temporada en el club pues su idea está demasiado alejada de la de Luis Campos, director deportivo del equipo y en el que se confía plenamente. Esta segunda versión me la creo un poco más, pero la destitución me parece una medida demasiado precipitada a estas alturas de la temporada. Hasta ahora los únicos clubes que lo han hecho en LaLiga fueron Elche y Sevilla, dos equipos que se encontraban en estado crítico. Y luego la pregunta de siempre: ¿a quién traes? En ese sentido, los últimos años del Celta han sido un continuo cambio de entrenador. Desde la marcha de Eduardo Berizzo han sido múltiples los entrenadores que han pasado por el banquillo celeste, y cuando parecía que se había encontrado cierta estabilidad con Coudet, volvemos a lo de siempre.

También hay que decir que la mala racha del Celta es engañosa, pues de sus últimos 7 partidos algunos fueron contra equipos de la talla de Atlético de Madrid, Valencia, Betis (partido que ganaron), Barcelona y Real Sociedad. Los últimos dos fueron contra el Valladolid, partido en el que el Celta se llevó una goleada que no reflejó el devenir real del encuentro, y Getafe, un empate que lograron en la recta final del partido pues sabemos que el Getafe es un experto en defender un resultado a favor.

En definitiva, en mi opinión los tres partidos ligueros (y el de Copa, en menor medida) que quedan antes del parón del Mundial son decisivos. Los rivales: Almería, Osasuna y Rayo Vallecano. Después, la primera ronda de Copa del Rey, donde caer eliminado sería el desastre máximo. Conociendo ya estos resultados y, sobre todo, viendo cómo funcionó el equipo, es ahí a partir de donde hay que hacer especulaciones y, llegado el caso, buscar cambios. Una cosa está clara, los jugadores tienen que dar la cara, porque todos sabemos la calidad que tiene Aspas, pero como él muy bien dijo «no puedo ser mamá y papá al mismo tiempo» refiriéndose a que si baja a recibir para hacer de centrocampista no puede estar arriba para marcar goles. Y el Celta sin los goles de Aspas es mucho menos Celta y mucho menos equipo.

Imagen de cabecera: Celta de Vigo

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