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Fútbol femenino

Llegar y enamorar

“Adaptarse a un lugar, situación o ambiente distinto del que se procede”. Esta definición con la que he querido arrancar este artículo puede encontrarse en cualquier diccionario junto al verbo “aclimatar”, un proceso que todos hemos experimentado en alguna ocasión cuando hemos cambiado de escuela, de casa, de ciudad o de trabajo. Por lo general nos suele llevar un tiempo acostumbrarnos a ese cambio, unas veces más y otras menos, pero no es nada habitual que la aclimatación a algo nuevo se produzca en un abrir y cerrar de ojos. 

Pero que no sea lo normal no quiere decir que no pueda darse. Hay casos en los que las piezas de ese nuevo escenario encajan a la perfección desde el minuto uno, y en que por lo tanto no hace falta adaptarse a nada. Este año en la Primera Iberdrola tenemos un claro ejemplo de ello. Natalia Arroyo aterrizaba en el banquillo de la Real Sociedad el pasado verano, sustituyendo a un Gonzalo Arconada que había dejado el listón muy alto con registros positivos en liga y la conquista de una Copa de la Reina. Mejorar dicho bagaje podía suponer un reto para cualquiera, pero Natalia no dudó ni un segundo a la hora de afrontar ese desafío.

En el mismo instante en que el cuadro txuri urdin anunció la contratación de su nueva entrenadora, muchos supimos que este curso en Zubieta se iba a ver muy buen fútbol. La llegada de jugadoras como Nuria Rábano, Gemma Gili, Maitane o la finlandesa Sanni Franssi no hacía más que confirmar esa idea. Por lo que tan sólo faltaba comprobar si esa nueva filosofía de juego tan atractiva, estaría también a la altura de las expectativas en cuanto a resultados se refiere. Y vaya si lo ha estado. La Real se ha convertido en una de las sensaciones de la temporada, por la personalidad que derrocha como grupo y por su juego vistoso a la par que efectivo. Desde la primera jornada de campeonato hemos visto un equipo fresco, trabajado y con las ideas muy claras, capaz de desarrollar con éxito una idea de juego implantada pocos meses atrás. Y eso es mérito de jugadoras y cuerpo técnico.

Esa rápida aclimatación por ambas partes se ha traducido en un año para enmarcar. El cuadro donostiarra ha merodeando durante toda la competición los puestos Champions, llegando a las jornadas finales con opciones reales de estar en Europa el próximo curso. Será complicado, pues la diferencia con el tercer clasificado es ahora mismo de 9 puntos y tan solo quedan 12 en juego, pero con un partido menos el equipo de Natalia Arroyo todavía puede soñar con recortar distancias y darle un susto a Levante y Real Madrid. 

Las jugadoras de la Real Sociedad celebran un gol vs Atlético de Madrid – ImagoImages

Pero más allá de la lucha por disputar la Women’s Champions League, el hecho de terminar entre las cuatro primeras plazas de la Primera Iberdrola ya sería todo un hito para la Real. La mejor clasificación del conjunto vasco en liga es bastante reciente, dado que se trata de un 5º lugar cosechado en la temporada 2015/16. Con lo que el cuadro txuri urdin, en caso de finalizar en esa cuarta posición, estaría firmando el mejor registro de su historia en el primer año bajo la batuta de su nueva entrenadora.

También destacar que la juventud está teniendo un papel más que importante en la puesta en escena de esta Real. En la mejor versión del conjunto de San Sebastián han estado presentes futbolistas como Adriana Nanclares, guardameta de tan solo 19 años que le ha disputado la titularidad a toda una Mariasun Quiñones. O la misma Nuria Rábano (21 años), mencionada anteriormente, fichada del Deportivo Abanca y que se ha hecho dueña y señora del carril izquierdo en este equipo. Y no podemos olvidar a Ana Tejada y Nerea Eizaguirre (18 y 21 años respectivamente), piezas fundamentales para la defensa y el ataque blanquiazul en un año que difícilmente podrán olvidar, debido a que ha supuesto para ellas la consagración en la élite.

La pólvora de este equipo arriba también ha influido y mucho en los resultados cosechados. Las pasadas temporadas Nahikari cargaba con toda la responsabilidad goleadora del cuadro donostiarra, en cambio este año varias futbolistas le han brindado un respiro a la delantera de Urnieta, que por el momento ha marcado 9 goles en lo que va de liga. Nerea con 11 dianas y Franssi con 10 son las máximas artilleras de la plantilla, y otra recién llegada con un futuro más que prometedor, como es Amaiur Sarriegi, aporta la nada despreciable cifra de 8 tantos a la causa. 

La realidad es que a esta Real se le pueden poner muy pocos peros. En su primera temporada Natalia Arroyo ha demostrado de lo que es capaz en un banquillo, transmitiendo a sus jugadoras los mismos conocimientos con los que nos ha deleitado durante los últimos años en las retransmisiones de GOL. Con ella al frente este equipo puede no tener techo, y con el tiempo y la confianza de la directiva como sus mejores aliados, todos podemos ser testigos de ese crecimiento. Natalia aterrizó en Zubieta y nos enamoró al instante, las piezas encajaron a la perfección desde el minuto uno y por lo tanto no hizo falta aclimatarse a nada. No fue necesario “adaptarse a un lugar, situación o ambiente distinto del que se procede”.


Imagen de cabecera: ImagoImages

Contenido patrocinado por: Iberdrola

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