El Arsenal continúa con su bagaje negativo en los octavos de final de la UEFA Champions League. El registro más reciente fue la derrota contra el Bayern de Munich en el Allianz Arena por 5-1, dejando el conjunto bávaro la clasificación más que encarrilada.
La historia del conjunto inglés con las eliminatorias europeas comenzaron a ir cuesta abajo en la temporada 2011-2012 con el FC Barcelona como rival.
Aquel año, los pupilos de Arsène Wenger vencieron 2-1 en la ida al conjunto azulgrana, pero en el Camp Nou la pesadilla comenzó a fraguarse, quedando eliminados con un global de 4-3.
En la siguiente temporada el AC Milan esperaba a los «Gunners» en la primera fase eliminatoria. Goleada de los rossoneri por 4-0 en Giuseppe Meazza y en la vuelta el Arsenal se quedó a un gol de forzar la prórroga.
En la campaña 2012-2013, Arsène Wenger y su equipo se enfrentarían al Bayern, quedando de nuevo abatidos de la Champions a primeras de cambio. Ese mismo año, el conjunto alemán se proclamó campeón de Europa con Jupp Heynckes como técnico.
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Año nuevo y esperanzas renovadas, o eso debían pensar en Inglaterra en 2014. De nuevo, en frente los alemanes esta vez con Pep Guardiola en el banquillo del Allianz también fueron capaces de abatir al Arsenal de su camino.
Hace dos temporadas, los ingleses se encontraban en el camino con el Mónaco, a priori rival factible para sus intereses. Pero no más lejos de la cruda realidad, el conjunto francés se deshizo del Arsenal.
El año pasado, el FC Barcelona se cruzaba con el Arsenal para aumentar la pesadilla del Arsenal con los octavos de final. Leo Messi y compañía dejaron en la cuneta de Europa a los «Gunners» por un global de 5-0.
Esta temporada sellaron su pase a octavos como líderes del Grupo A por delante del Paris Saint-Germain. De nuevo, el azar del sorteo puso al Bayern de Munich en escena contra los ingleses. Los bávaros solventaron el encuentro y salvo milagro la eliminatoria, derrotando al conjunto de Arsène Wenger, lo que provoca que el futuro del técnico francés penda de un hilo cada vez más frágil.
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