La Federación Italiana de Fútbol anuló hoy la sanción de un partido al mediocampista ghanés del Pescara Sulley Muntari, que abandonó el último juego de su equipo por recibir insultos racistas.
«El Tribunal de Apelación Nacional Deportivo ha aceptado la apelación del futbolista Muntari anulando el partido de descalificación», escribió la Federación en su cuenta Twitter.
Cuando corría el minuto 90 del encuentro entre el Pescara y el Cagliari, Muntari, de 32 años, comenzó a protestarle al árbitro Daniele Minelli por los insultos racistas que estaba recibiendo por parte de los aficionados del Cagliari.
Como no obtuvo ninguna respuesta, dirigió sus protestas hacia el cuarto árbitro. En ese momento, Minelli le mostró la tarjeta amarilla, lo que enfureció aún más al futbolista, que decidió abandonar el campo y dejar a su equipo con diez jugadores en los últimos minutos del partido.