Cuesta creer que en todos estos años, donde muchos
futbolistas han sido invitados a los podios en los premios individuales de
honor, nunca haya aparecido la figura del Kun Agüero entre los
candidatos. Y es que el argentino, que no para de romper registros en
Premier League, es el líder de uno de los equipos más dominadores de la
década en uno de los mejores campeonatos nacionales.
Quizás al Kun le haya pesado el poco protagonismo de su
equipo en competiciones internacionales, es decir, en Champions League, y
puede que también las lesiones que le apartaron de Argentina a mitad del
Mundial 2014, donde la albiceleste rozó el cielo, hayan limitado sus opciones
para un mayor reconocimiento popular.
Agüero ya era determinante en el Atlético de Madrid,
en un equipo ciertamente bastante lejos del primer nivel. Sin duda, el
argentino estaba por encima del status del equipo colchonero. Pero desde
que llegó a la Premier League, ese olfato goleador que adquirió le ha
catapultado hasta ser uno de los mejores jugadores del mundo y uno de
los más determinantes.
Suele haber muchos focos sobre las figuras de Kevin De
Bryune y Sterling, como también los hay sobre Bernardo Silva y como los ha
habido en ciertas fases sobre David Silva. La realidad es que cuando Agüero
no juega, al City le cuesta encontrar el camino del gol y la clarividencia
en ataque. Es sin el argentino cuando los de Guardiola (también sucedió con
Pellegrini e incluso Mancini) más obstáculos encuentran para llevarse los tres
puntos jornada tras jornada. El Kun es insustituible.
En tiempos en los que el dominio del cetro mundial ha sido
casi monopolio de Messi y Ronaldo, el tercer lugar del cajón en
discordia ha ido repartido en jugadores dispares como Neymar o Griezmann,
pasando también por Iniesta, Van Dijk, Modric, Ribery o Neuer. Pero nunca nadie
se ha acordado del Kun, quizás también por ser compatriota de un Messi
que copa todas las miradas en Argentina.
En su estadía en Manchester, el argentino ha levantado
cuatro títulos de Premier League, además de ocho trofeos en distintas Copas
nacionales. Ha sido una vez Bota de Oro del campeonato, en 2015, y
siempre ha estado peleando por el premio al máximo artillero con diferentes
rivales.
El domingo, el Kun anotó un hat-trick, alzándose además en su poder con varios récords. Es el jugador con más tripletes en la historia del campeonato, con 12, superando a toda una leyenda como Alan Shearer. Es también, el futbolista extranjero que más veces ha visto puerta, por encima de Thierry Henry. Y es, sobre todo, el cuarto máximo artillero de la historia de la Premier League. Las 177 dianas que ha logrado en sus años en Mánchester solo están por debajo de Andy Cole (188), Wayne Rooney (208) y Alan Shearer (260).
Muy mal se le tiene que dar la temporada para no acabar ya
entrando en el podio y de seguir alguna temporada más como Citizen antes
de volver a Independiente debería superar a Rooney sin problema.
Lo de Shearer ya parecen palabras mayores, aunque si consigue alargar un poco
su estancia en la Premier nada le podría impedir hacerlo, sobre todo si tenemos
en cuenta que es el futbolista con mejor promedio goleador de la historia
del campeonato. Marca 0’69 tantos por partido, mientras que Kane y Henry,
inmediatos perseguidores, lo han hecho cada 0’68. El Kun solo ha necesitado 255
partidos para llegar a sus 177 tantos, mientras que Shearer hizo los suyos en
441, Rooney en 491 y Cole se fue hasta los 415.
En el global de las competiciones, Agüero ha marcado 249
goles desde que aterrizara en el Etihad, que ha adornado con 72
asistencias. Esta década, es el sexto jugador con más dianas, solo por
detrás de Messi, Ronaldo, Lewandowski, Cavani y Suárez, aunque muy cerca de
estos dos últimos. Además, el ser más joven que todos estos (comparte
generación con el polaco) invita a pensar que pueda acercarse o llegar incluso
a ese top 3 si puede estirar un poco más el chicle.
Siempre en el disparadero del gatillo fácil, con la crítica
en el pasado de su físico regordete, Agüero, amante empedernido de la carne
y las bebidas con gaseosa, se hizo vegetariano hace varias temporadas para
intentar adoptar una mejor figura y buscar una solución a las lesiones musculares
que le maltrataban entonces. Parece que lo encontró.
Aunque todo esto no haya significado para tener un mejor
reconocimiento popular. Tampoco ser el tercer máximo goleador de la
selección argentina, solo por detrás de Messi y Batistuta y superando, por
ejemplo, a un Higuain que ha jugado más partidos que él y ha conseguido menos
dianas.
Agüero, ese comparado con Romario que pasó de
gambeteador a goleador y luego fusionó ser un todo en uno. El mejor amigo y
socio de Messi en cada concentración albiceleste. Ese que no sucumbió
tampoco a un inicio arrollador de Gabriel Jesús cuando se estrenó como Citizen
y la prensa británica anunciaba que esa competencia acabaría con el ariete
argentino. El Kun, a quien le une una difícil relación con Guardiola, y
a quien el técnico se ve casi obligado a poner por el rendimiento que le da.
El Kun prometió que volvería joven a Independiente. De
hecho, siempre habló de volver poco antes de cumplir la treintena y amenazaba
con haberlo hecho a los 29, cuando iba a expirar su contrato. El City,
entonces, se las vio y se las deseó para convencer al mejor jugador de toda
su historia para seguir. Porque hubo muchos antes que intentaron ser el
jugador franquicia de un club que quería coger altura de megaestructura pero no
fue hasta la llegada del argentino cuando realmente encontró un líder y un
jugador especial para hacerlo. Ya tiene 31 años, cuerda para rato y de
alargarse un poco su morriña de volver a casa, podría convertirse en el
poseedor de todos los récords del país en cuanto a goles marcados. Qué poco
valorado está.