David SANTERO – Si hace un mes todo era pesimismo, malas noticias y desgracias en Villa Park, desde la llegada de Tim Sherwood la situación ha dado un giro de 180⁰. En apenas una semana, el equipo ha pasado de estar prácticamente desahuciado en la temporada a formar parte de los cuatro equipos privilegiados que se jugarán la FA Cup en el mítico estadio de Wembley. En Premier League, el equipo parece haber encauzado su caótico rumbo, con las dos últimas victorias que le hacen tomar un poco de oxígeno a nivel deportivo.
Parece que todo marcha en el camino hacia la renovación del proyecto que fracasó con Paul Lambert. Fruto de este cambio es la confianza que están recibiendo algunos jugadores jóvenes que no contaban con minutos con el técnico escocés, como Okore, Bacuna o Grealish. Conocido es el gusto de Sherwood por los jóvenes talentos, y en la academia del club villano ya se frotan las manos.
El primer bendecido por el técnico inglés ha sido Hepburn-Murphy, un adolescente de 16 años que disfrutó del momento más feliz de su todavía corta carrera, al debutar con el primer equipo en la victoria del Aston Villa por 0-4, a domicilio, ante el Sunderland, recibiendo la alternativa de nada más y nada menos que Christian Benteke.
Rushian Hepburn-Murphy nació en Birmingham el 19 de septiembre de 1998, apenas dos meses después de que Zidane se convirtiese en campeón del Mundo en Francia (no había nacido cuando se disputó el mundial de 1998), o tres meses después del debut de Gareth Barry con 17 años y 72 días, lo que hasta ayer le convertían en el debutante más joven de la historia del Aston Villa.
Ahora, este rápido delantero formado en las categorías inferiores del club de Birmingham, ha establecido la nueva marca en 16 años y 176 días. En su haber tiene la incuestionable etiqueta de ser el máximo goleador del equipo sub-18 del club, y un talento que, aunque es pronto para valorar su capacidad de rendir en la élite, sí que le convierte en un jugador a seguir y muy a tener en cuenta en el futuro del equipo.
De momento, Rushian ya está quemando etapas a la misma velocidad con la que tira desmarques en el fútbol base del país británico, y a buen seguro que Sherwood seguirá tomando buena nota de sus avances. Sin duda alguna, otra noticia destacada y positiva para el club inglés, que comienza a mejorar, que vuelve a sonreir.