Síguenos de cerca

Fútbol femenino

Granotas por Europa

El calendario de Primera Iberdrola empieza a ser objeto de revisión constante por parte de todos los integrantes de la competición. Estamos a punto de entrar en las últimas diez jornadas de campeonato y los equipos comienzan a hacer sus cábalas calculadora en mano, intentando cuadrar las cuentas para que el objetivo marcado al inicio de temporada sea un hecho a pocos meses vista. Y es que da igual cual sea tu meta, tanto si buscas un billete para Europa como si quieres salvar la categoría, las matemáticas son las que decidirán si tienes algo que celebrar a final de campaña o si toca agachar la cabeza y analizar aquello que se ha hecho mal.

Buñol no es una excepción. Allí los aficionados del Levante echan cuentas para saber qué opciones reales tienen sus jugadoras de volver a pasear el escudo granota por el viejo continente. La clasificación no engaña, son las mejor posicionadas para ello y la reciente victoria ante el Real Madrid ha dado alas a las de Maria Pry, pero la distancia con los perseguidores y el margen de error siguen siendo escasos. Victorias como la del pasado domingo tienen un valor enorme, sumas y evitas que un rival directo lo haga, pero tropiezos como el de hace 15 días ante un Betis en descenso evitan que podamos asegurar de todas todas que este Levante será de Champions.

Los aficionados azulgrana no cantan victoria, todavía es temprano para ello, pero inevitablemente echan la vista atrás y viajan en el tiempo hasta la temporada 2008/09. Allí su equipo disputó por última vez la máxima competición continental, donde quedó eliminado en la liguilla previa a los cuartos de final. El cuadro levantinista, entrenado por aquel entonces por José Arastey, goleó al Naftokhimik ucraniano en la última jornada de la fase de grupos, pero las derrotas anteriores frente a Duisburgo y Brondby mandaban al cuadro de Buñol de vuelta a casa.

Durante los siguientes 13 años el club granota ha sido consciente de la dificultad que suponía poder disputar de nuevo la Champions. Primero por el hecho de que durante años tan solo el campeón de la liga española tenía derecho a disputarla. Y más tarde, cuando ya el primer y el segundo clasificado de Primera Iberdrola obtenían pasaporte para Europa, la eclosión y dominio de conjuntos como el FC Barcelona o el Atlético de Madrid ha cerrado el paso al resto de clubes.

Pero tras dos temporadas consecutivas en las que el Levante se ha quedado literalmente a las puertas de volver a vivir la magia de la Women’s Champions League, parece que a la tercera puede ir la vencida. La edición 2021-22 del torneo contará por primera vez con la presencia de tres equipos españoles y, a pesar de que este año la competencia para obtener la segunda o tercera plaza del campeonato liguero está siendo trepidante, el conjunto valenciano tiene motivos de sobra para ser optimista.

Si eso finalmente acaba sucediendo, y el escudo del Levante se pasea por Europa tras 13 años sin hacerlo, deberemos señalar con el dedo a una serie de “culpables”. Podríamos empezar por el banquillo, donde podemos afirmar sin miedo a equivocarnos que Maria Pry ha sabido implementar en sus jugadoras la misma combinación de vistosidad y efectividad que puso en práctica en el Betis, y que convirtió al cuadro verdiblanco en uno de los equipos más atractivos del panorama nacional.

Si nos centramos exclusivamente en lo que sucede sobre el césped debemos resaltar la irrupción de una jovencísima María López bajo palos, que con tan solo 18 años ha sentado en el banquillo a una guardameta consagrada como Andrea Paraluta. La combinación de juventud y talento es omnipresente en el centro de la zaga, con una María Méndez y una Rocío Gálvez que en pocos años pueden ser las nuevas Mapi León e Irene Paredes de la selección española. Y en la zona de medios hay que sacarse de nuevo el sombrero con la dirección deportiva del club, puesto que la incorporación en verano de la ex del Montpellier, Sandi Toletti, le ha aportado consistencia y llegada a un centro del campo que acababa de perder a una Maitane casi imposible de reemplazar.

Pero como todos bien sabemos esto va de marcar goles. De nada sirve tener una retaguardia de lujo si después arriba la pólvora está mojada. Y ahí Esther González Rodríguez, secundada por unas gregarias de lujo como Alba Redondo y Eva Navarro, está marcando las diferencias en el plano goleador. La de Huéscar suma 20 goles en 23 jornadas de liga disputadas, liderando la tabla de máximas anotadoras de la Primera Iberdrola por encima de nombres de vértigo como los de Jenni Hermoso, Asisat Oshoala o Ludmila da Silva. Goles que sin duda bien pueden valer un billete para disputar la próxima Women’s Champions League.

Esther González celebrando un gol anotado frente al Real Madrid Femenino. (Iván Terrón/ImagoImages)

¿Disputará el Levante la máxima competición continental el año próximo? Nadie en su sano juicio puede darlo por hecho, dada la cantidad de puntos que quedan por disputarse y la tremenda igualdad que hay en la parte alta de la clasificación de la Primera Iberdrola este año. Sin embargo, si les interesa mi opinión, yo me mojo y estoy convencido de que en unos meses veremos a las futbolistas de Maria Pry enfrentándose a rivales ingleses, franceses, alemanes o de cualquier nacionalidad de nuestro continente. Quizás, tras 13 años sin hacerlo, volvamos a ver granotas por Europa.

Imagen de cabecera: ImagoImages

Contenido patrocinado por Iberdrola

Comparte la notícia

No te lo pierdas

Más sobre Fútbol femenino