Por el camino ya se han desembolsado más de 160 millones y la Juventus sigue en superávit. Como pez en el agua, los bianconeri en cada mercado tienen una oportunidad de superarse. En este último, conscientes de la salida de Paul Pogba, se ha invertido una buena cantidad de dinero en reforzar el equipo además de la llegada de Gonzalo Higuaín para ser un serio aspirante no solo a reinar en Italia sino en todo Europa.
En Serie A, a diferencia del año pasado, el equipo se ha levantado con buen pie y no como hiciera el año pasado con un arranque desastroso. 6 puntos de 6 posibles en dos resultados por la mínima, demuestra el momento y las circunstancias de la temporada. Ante rivales complicados nada más empezar, la Juventus ya va mostrando sus cartas y por ahora, la mejor de todas, el as que guarda baja la manga, no es ni Higuaín, ni Mandzukic, ni Pjaca, ni siquiera Paulo Dybala.
En la primera jornada, a menos de 30 para el final hondeaba una ligera ventaja en el marcador. Como no, el autor de la firma era aquella carta mágica. Un hombre que nunca había sido valorado al nivel de sus movimientos y por supuesto de su juego. Sami Khedira, que había llegado libre procedente del Real Madrid hace justo una temporada, había abierto la lata de la Juventus en esta nueva temporada, en un movimiento de manual perfecto para encontrar zona para el remate. Allegri al término del encuentro hablaba sobre el alemán: “Khedira es un jugador de enorme nivel que solo ha entrenado durante los últimos 15 días”.
En la segunda jornada en una salida complicada ante la Lazio de Inzaghi, bien trabajada tácticamente, el resultado al descanso era de 0-0 en el luminoso. Los romanos jugaban a no perder y la Juventus con mucho balón no encontraba el hueco por donde ganar superioridad. Y ahí es donde nace la nueva combinación que tantos puntos va a generar en favor de los de Turín. En banda derecha, un Dani Alves que acaba de llegar ya se ha asentado como titular y además va ganando en roles dentro del equipo, siendo hasta el tirador de faltas por delante de Dybala en el sector derecho de la zona de ataque. Por delante del brasileño, cae a banda Paulo Dybala, la estrella sobre la que el equipo debe construir, es un peligro constante, merodea por todos los sectores, siendo la derecha, su lugar preferido. Allí, argentino y brasileño, quieren el balón, se asocian y se encuentran.
Khedira en un trivote junto a Lemina y Asamoah gana en libertad, no debe preocuparse de su retaguardia ni tampoco de su espalda. Sube constantemente y la Juventus gana con el factor sorpresa, el as bajo la manga. En esta circunstancias, el alemán se siente como en casa, demuestra del potencial que tiene sobre su cabeza y sus piernas. Traza movimientos sin balón que son un manjar para los dueños de la banda derecha y en una de esas, clava su colmillo sobre presa rival, que para nada esperaba su llegada desde atrás.
En definitiva, un hombre que llegó libre del Real Madrid tras no cuajar en la capital de España, se ha convertido en una pieza clave en el sistema de Allegri. De momento, hasta diferencial. Dos de dos en Serie A, ambos para abrir la lata en el marcador. Con Khedira sobre el campo, la Juventus ha conseguido 21 victorias en 22 partidos. Solo un 0-0 contra el Inter y no más de 10 goles recibidos. No es que haya empezado como un tiro sino que también acabó la temporada pasada igual. 4 goles y 1 asistencia en los últimos 6 partidos del alemán en Serie A.
J30: Torino 1-4 Juventus (gol)
J33: Juventus 4-0 Palermo (gol)
J34: Juventus 3-0 Lazio (asistencia)
J35: Fiorentina 1-2 Juve (nada)
J1: Juventus 2-1 Fiorentina (gol)
J2: Lazio-Juventus 0-1 (gol)
*Las jornadas 31 y 32 estuvo suspendido por roja y las 37 y 38 apartado por lesión.
