David De Gea tiene todas las papeletas de convertirse en uno de los grandes culebrones del presente verano en materia de fichajes. El portero español del Manchester United es claro objetivo del Real Madrid para reforzar la portería local del Santiago Bernabéu, pero su llegada, de momento, parece que será tema de conversaciones durante algunas semanas.
Un jugador que ya conoce el fútbol español, que conoce la ciudad de Madrid, pero en otros lares, con otros filtros, cuando militaba en las filas del Atlético de Madrid. Un hipotético fichaje por el Real Madrid podría convertirle, casi de forma automática, en tema de debate entre las dos mayores aficiones de la capital española.
La relación entre Manchester United y Real Madrid viene de lejos. Numerosas han sido las operaciones económicas que se han llevado a cabo entre ambas instituciones en los últimos años. Varios jugadores han decidido cambiar de aires con dos de las grandes potencias del fútbol europeo y mundial, y los grandes rumores e informaciones apuntan a que De Gea sería el siguiente.
Jugadores como Michael Owen, David Beckham, Ruud van Nistelrooy, Gabriel Heinze, Cristiano Ronaldo, Ángel Di María o Chicharito Hernández han sido casos de futbolistas que han vestido ambas camisetas en la última década. Futbolistas de primer nivel, con carreras deportivas de cierto peso, concretándose como traspasos mediáticos.
Futbolistas respetados, que se habían convertido en auténticos jugadores mediáticos, y que además habían conseguido grandes retos en Manchester. Existe una corriente deportiva, e institucional, que podría dar una pista sobre el futuro de David De Gea. El portero español fue premiado a final de la pasada temporada 2014/15 como el Mejor Jugador de la plantilla de Old Trafford, consagrando de forma oficial el gran año deportivo que ha vivido en el fútbol inglés.
Varios futbolistas del Manchester que recibieron este galardón institucional acabaron vistiendo tiempo después la camiseta del Real Madrid. Futbolistas idolatrados, determinantes en sus parcelas concretas, que acabaron siendo seducidos (todos ellos) por las artes de Florentino Pérez.
David Beckham fue elegido MVP del Manchester United en 1997, cuando comenzaba su progresión, cuando lo mejor de su carrera deportiva parecía estar por llegar. 7 años después, en 2003, se convertía en uno de los fichajes más mediáticos dle mundo, y se convertía en una de las grandes piezas de ‘los Galácticos‘. Pero no fue el único. En 2003, Ruud van Nistelrooy fue elegido el MVP del Manchester United, pero en 2006, se convertía en nuevo delantero madridista. Cristiano Ronaldo fue otro ejemplo, ganando el galardón individual en 2008 y firmando meses después con el club de Concha Espina.
Algunos dan por hecho la marcha de David De Gea, quien fue premiado con el galardón individual. Louis van Gaal parece no haber tomado la postura de la rigidez, e incluso ha jugado con la prensa asegurando que la pareja del portero es española, y entendería la decisión del jugador. Las informaciones sobre su futuro en el Santiago Bernabéu son continuas, algunas más contundentes que otras, y lo que parecía claro a finales de temporada ha entrado en esa temida corriente veraniega de los culebrones, de los fichajes que parecen eternos.
David De Gea firmó en la temporada 2014/15 la que pudo ser la mejor de su carrera profesional. Actuaciones vitales, paradas determinantes, que ayudaron a los suyos a sumar puntos, aportando de forma directa para el objetivo final de entrar en puestos de Champions League. Quizás, la temporada de su consagración en Inglaterra, tras un inicio complicado, y que le hace ahora estar, parece ser, más fuera que dentro del seno de Old Trafford.