El despido de Ronald Koeman ha dejado vacante el banquillo del Everton, uno de los puestos más atractivos en el panorama técnico actual.
Tras invertir más de 160 millones de euros en fichajes, el horrible inicio de campaña del equipo del Mersey, con el club en puestos de descenso, obliga a buscar un entrenador de garantías.
Las principales opciones que se barajan son el retorno de David Moyes, que ya estuvo en el club en una larga y exitosa etapa entre 2002 y 2013; y la llegada de Thomas Tuchel, que dejó el Borussia Dortmund en verano.
Otros nombres más improbables que se han barajado son el de Carlo Ancelotti, que en su día ya decidió que se tomaría un año sabático tras su despido del Bayern; o el italiano Walter Mazzarri, tras una mala experiencia en el Watford. Una leyenda del fútbol británico como Ryan Giggs también se ha ofrecido al puesto.