Lo mejor de anoche en León fue, por supuesto, el resultado y el minuto 79′ cuando Julen Lopetegui -seleccionador español- dio entrada a Marco Asensio en lugar de Vítolo para así disipar todas las dudas que alejaban al mallorquín de la Selección. El futbolista del Real Madrid, que tan bien ha empezado la temporada bajo las órdenes de Zidane, disputó no más de 13 minutos, suficientes para cerrar el debate y plantar su semilla en el futuro de la Selección.
Asensio había sido internacional con España en varias de las categorias inferiores pero, mientras no lo fuese de manera oficial con la absoluta, la normativa FIFA permitía a Holanda convocarle, y del jugador aceptar, la Oranje nos habría arrebatado una estrella.
Todo este problema ocurre por motivos de ascendencia. El joven extremo balear tiene a su padre, Gilberto Asensio, vizcaíno y español. Al otro lado, su madre, de origen holandés fue víctima de un cáncer en 2011 cuando Asensio solamente tenía 15 años. Desde entonces, Marco ha crecido junto a Gilberto y su hermano Igor sin olvidar el recuerdo de su madre. A día de hoy, todos los goles los dedica a su madre, Maria Gertruida Margaretha Willemsem. Pese a ello, familiares de su madre le pidieron que fuera con Holanda, el jugador reconoce haber tenido contactos con Holanda pese a que su idea siempre fue firme de jugar con España.
Allí, entre la prensa y las redes sociales incluso se creó un hashtag para que Asensio acabase siendo tulipán #AsensioWillemInOranje. Con todo esto, los 13 minutos de la noche de ayer saben a gloria para el fútbol español. Marco Asensio ya es español a todos los efectos. Debutó en partido oficial y no cabe duda del acierto en su elección. Muchos años de gloria le esperan a Marco junto a La Roja.
Comparte la notícia
