Síguenos de cerca

Premier League

Una historia interminable

Hay pocos resultados más evidentes que la victoria del Liverpool en Anfield ante el Everton. Es un problema histórico de los toffees, que en dos décadas han conseguido ganar una vez en el feudo rival. Fue el año en el que no había público por el virus. Parece que fue ayer, pero James Rodríguez lideraba al conjunto de Carlo Ancelotti. Han cambiado demasiadas cosas.

Los de la parte azul de Liverpool se agarraban a un clavo ardiendo para creer. Jurgen Klopp lleva todo el año desesperado viendo cómo se resquebrajan sus futbolistas en el verde. Su equipo no presiona bien, no marca goles y echa de menos a Virgil van Dijk. Eso les ha llevado a ver la Champions League con el telescopio. Por ello, Sean Dyche pisó el verde de los reds creyendo. Con la baja de Calvert-Lewin -una vez más lesionado- decidió introducir a Simms, un joven chaval que ha jugado en el Sunderland la primera parte de la temporada. ¿Empiezan a comprender por qué los directivos del Everton no se asoman por Goodison Park? Cabe recordar que han vendido a Gordon y no han sido capaces de firmar a ningún futbolista.

El nuevo técnico ha mutado la idea de Frank Lampard. Con la leyenda del Chelsea en el banquillo, el cuadro enloquecía defensivamente. Si uno perdía la posición saltaban los demás sin ningún sentido. Es decir, la zaga sufría. Con Dyche el esquema es un 4-1-4-1 en el que son los interiores, tras unos cuantos pases rivales, los que van a por los centrales. Salió muy bien ante el Arsenal y estaba funcionando ante sus enemigos irreconciliables hasta que Tarkowski tiró un balón al palo.

En cuestión de 13 segundos todos supimos que el partido se terminó. El central de los visitantes tuvo el gol a la salida del córner, pero el cuero no quiso entrar. Los anfitriones salieron a la contra -como el mejor Liverpool-y anotó Salah a placer. Partido finiquitado. El choque sirvió también para que Gakpo cogiera confianza -marcó su primer gol con su nueva camiseta- pero sobre todo evidenció que Dyche tiene un reto tremendo: le va a costar hacer un once de garantías, ya que gran parte de la plantilla que dispone no tiene nivel para la Premier. En Anfield, con el 2-0, miró a su banquillo y entendió que tiene mucho trabajo por hacer.

Imagen de cabecera: @LFC

Martorell (Barcelona), 1996. Periodista freelance. Amante del fútbol y loco por la Premier League. En mis ratos libres intento practicarlo.

Comparte la notícia

No te lo pierdas

Más sobre Premier League