Síguenos de cerca

Otros

Tana: talento solista, espíritu coral

Año 2002, Brunete, Madrid. La primavera se revuelve nerviosa en su asiento, sabedora de los pocos días protagónicos que le quedan por delante. Hace calor, quién esperaría otra cosa en Madrid a principios de Junio. El Estadio de los Arcos se prepara para albergar un torneo falto de pompa pero sobrado de ilusión y talento. Veinte equipos de fútbol alevín procedentes de toda la geografía española acapararán por unos días los olés y los flashes, cerca de doscientos chavales se sentirán en la piel de Figo, Rivaldo o Aimar, los ídolos del momento.
Aquel año Las Palmas se convirtió en la sorpresa de un torneo que ganó el Barcelona,entrenado entonces por Sergi Lobera -quien diez años después sería entrenador amarillo- y que contaba en sus filas con nombres conocidos por todos como Bojan, Iago Falqué y Fran Mérida. La final tuvo claro color blaugrana (5-1), pero los canarios dejaron huella por su descaro y valentía en el juego. Aquel equipo giraba en torno a un niño menudo y moreno, de regate eléctrico y juego anárquico. Aquella fue la presentación en sociedad de Pedro Tanausú Domínguez, “Tana”.

Fueron los albores de una carrera algo tumultuosa, que le llevó a salir de la Unión Deportiva y pasar por clubes tan dispares como el Unión Viera, Real Valladolid, Villa de Santa Brígida o U.D. Vecindario. Cuando muchos le habían perdido la pista -y algunos la fe- Tana sorprendió volviendo a la cadena de filiales amarilla. Era Enero de 2012 y su destino apuntaba al tercer equipo. Pocos podrían presagiar entonces que tan sólo un año después pasaría a formar parte de la primera plantilla del club . La eterna promesa dejaba atrás las carreteras secundarias y se incorporaba a la autopista por derecho propio.
Su primera temporada fue esperanzadora y repleta de destellos, el recién llegado pedía la pelota como sólo hacen los buenos futbolistas. Lobera, valiente, recompensó al canterano con minutos y peso en el equipo siempre que las impertinentes lesiones le respetaron. Aquella primavera fue la del fatídico playoff ante el Córdoba, un resultado que derivó en la contratación del veterano Paco Herrera. Se abrió entonces una etapa difícil para Tana, el preparador catalán dio más importancia a lo que le faltaba al mediapunta (cierto punto de madurez) en lugar de explotar aquello que le sobraba (talento). La alegría del ascenso no varió un ápice el pensamiento de Herrera: en Primera, Tana no contaba. Pero ya saben, por muy gris que parezca la situación casi siempre se abre una ventana. Con la salida de Paco y la llegada de Quique Setién la situación giró 180 grados para el futbolista de San Cristóbal. Desde el primer entrenamiento, Quique y Eder Sarabia lo tuvieron claro: “a este, galones”. La respuesta del futbolista estuvo a la altura: no sólo demostró virtuosismo con el balón, sin él mutaba en un gregario más. Desde entonces sólo las lesiones han sido capaces de apartar al 24 de la titularidad.
Desgranemos un poco su juego.

Leo Messi y Tana | Getty

Leo Messi y Tana | Getty

A primera vista lo que sorprende de él -al igual que ocurre con Roque Mesa- es la conjunción de dos aspectos poco comunes en un mismo futbolista. Tana aúna el perfil talentoso, creativo y divertido para el espectador con la brega, la disciplina táctica y la inteligencia. Ahondemos un poco más en la cuestión:

*Con balón. Lo primero que destaca es que es un receptor (del pase) inmenso. El control+orientación y el timing son de diez, casi perfectos. Su bajo centro de gravedad y potente tren inferior (unidos a su calidad) le hacen manejarse perfectamente en espacios cortos, algo fundamental en la idea de Setién. Es explosivo arrancando en estático y utiliza bien su cuerpo para proteger la pelota.
En conducción la lleva muy pegada al pie y suele acertar en la toma de decisiones -volvemos a su buen manejo de los tiempos-. Es certero también en el pase, sobre todo en distancias cortas. El desplazamiento en largo, en cambio, no está entre sus mayores virtudes.
Todo lo que hace lo ejecuta con velocidad y acierto.
Por último, cada vez define mejor, como muestran los 3 goles que lleva en este arranque de temporada. Tana no necesita demasiado espacio ni tiempo para armar la pierna.

*Sin balón. Aparte de las ganas y la pelea, DEFIENDE bien. Es pegajoso en el marcaje e inteligente en la presión, su despliegue físico se hace notar tanto en transición como en fase de repliegue.

*Físico. Explosivo al arrancar, fuerte y de baja estatura. De piernas cortas -y por tanto zancada-, sus posibilidades de ganar la carrera disminuyen según aumente la distancia a recorrer.

Con todo esto, es difícil fijar el techo de un futbolista de 26 años y tendencia creciente. Decía el otro día Andrea De Pauli -corresponsal de Corriere dello Sport en España y tertuliano en Bein Sports- que Tana le recordaba a su compatriota Emanuele Giaccherini, internacional italiano actualmente en las filas del Nápoles. Confirmaba además que  varios directores deportivos del Calcio le habían preguntado por el jugador de Las Palmas. Personalmente no me sorprende, estoy convencido de que su perfil encajaría de maravilla en la Serie A. Esperemos que en Italia se queden con las ganas.

Comparte la notícia

No te lo pierdas

Más sobre Otros