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Refuerzos que no refuerzan

La temporada no está siendo fácil para el Sevilla FC.
Los problemas entre la familia Del Nido y el Presidente Pepe Castro, el adiós
de Monchi y sus circunstancias, la fatídica enfermedad de Berizzo y su
decepcionante paso por el banquillo sevillista o los errores cometidos por
Óscar Arias y la secretaría técnica –que por cierto, sufrió una espantada tras
la salida de su máximo exponente en verano-.

Es evidente que el Sevilla FC no se reforzó lo debido
en el pasado mercado estival. El propio club lo reconoce de manera indirecta
cuando se ve obligado a firmar a cuatro futbolistas pocos meses después. Una
vez finalizado el segundo mes de 2018, es necesario hacer balance de lo que
dichos refuerzos han aportado al equipo que ahora dirige Vincenzo Montella.

Guilherme Arana

La palabra refuerzo le queda grande al brasileño, al
menos de momento. Ha sido el único fichaje de un Sevilla FC que apostó fuerte
por el lateral zurdo. El ex de Corinthians aterrizó en la capital andaluza a
cambio de 11 millones de euros y aún no sabe lo que es debutar con la elástica
sevillista. Montella no se atreve a darle minutos a un jugador al que parece
que aún le queda grande el salto a Europa. Al menos así lo ve el único que tiene
la decisión de darle la oportunidad de pisar el verde en La Liga. En la mayoría
de partidos ni siquiera entró en las convocatorias y el club nunca ofreció
ningún motivo al respecto.

A su favor, el problema que suelen tener futbolistas
brasileños cuando llegan a Europa en invierno. Llegan en enero justo cuando han
acabado la competición en su país, y por lo tanto pasan por un momento similar
al que podemos conocer de nuestros futbolistas en el mes de junio. Con las
piernas cargadas, falto de ritmo y con el hándicap de tener que acoplarse a un
equipo nuevo, en una ciudad nueva, con un entrenador nuevo, y en una liga de
mayor categoría que de la que vienen. Su potencial está por ver y no me
atrevería a decir que su fichaje ha sido un error hasta la próxima temporada,
cuando empiece desde cero como el resto.

Miguel Layún

Una cesión envuelta de polémica y un rendimiento por
debajo de lo esperado. Layún parecía tenerlo todo listo con el Betis hasta que
el Sevilla –de manera inesperada- cerró su llegada en una negociación exprés.
Sonreían en el barrio de Nervión por el simple hecho de quitarle un futbolista
al máximo rival, que decidió tomar nota de lo sucedido y fichar a Marc Bartra
como antídoto.

Pero los minutos de Layún están borrando la sonrisa en
el Ramón Sánchez-Pizjuán. De los cuatro futbolistas que llegaron en enero, el
mexicano ha sido el que más oportunidades ha tenido motivado por los problemas
en los laterales que se ha encontrado Montella con la lesión de Corchia y el
bajo nivel de Carole. La polivalencia de Layún es una virtud pero su
rendimiento está muy por debajo de lo esperado.

Roque Mesa

El centrocampista canario siempre fue objeto de deseo
del Sevilla FC. Tras marcharse al Swansea, se convirtió en una opción de
mercado necesaria. Cualquiera de nosotros habría apostado por Roque Mesa para
reforzar al equipo viendo los problemas que existían en la medular.

Recién aterrizado, Montella le dio el timón del equipo
en Eibar. Fue su condena. Poco más de 50 minutos que evidenciaron el estado de
forma del mediocentro español, lejos del que mostró en Las Palmas. Desde
entonces apenas ha jugado 15 minutos, precisamente en su ciudad natal y ante su
ex equipo.

Sandro Ramírez

El cuarto en discordia. El Sevilla FC necesitaba un
delantero centro diferente a Muriel y Ben Yedder. El primero mejora
notablemente con Montella en el banquillo pero es evidente que no es un
goleador nato. Ben Yedder es más nueve de área, pero su nivel está lejos de lo
que se ha visto en Sevilla en la última década. La llegada de un killer del
área era más que necesaria.

Sandro fue el elegido. Tras sondear la opción de
Batshuayi, el ex delantero de FC Barcelona o Málaga CF acabó siendo el hombre
que llegase para resolver los problemas ofensivos del conjunto hispalense. 100
minutos después, sigue sin ver puerta.

Tres cedidos y un fichaje. Cuatro refuerzos que poco
refuerzan. Futbolistas con nivel que no alcanzan su plenitud física y que
juegan con el reloj en su contra. Cada partido es una oportunidad. Cada minuto
es una prueba. Cada error es su sentencia. 

Sevilla. 1984. Creador de #HoradeBundesliga. Redactor y coordinador de fútbol alemán en SpheraSports. Empiezo a ser útil cada semana en los estadios de Sevilla, Betis y Córdoba. Enamorado del fútbol, amante de la Bundesliga. Es duro fracasar en algo, pero aún más duro es no haberlo intentado.

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