“Me quedaría en España,
pero no siempre la mejor posibilidad está aquí”. Raúl
Albentosa, con una dilatada carrera a su espalda, es uno de los
muchos futbolistas que saben lo que significa emigrar. El talento español es
un dulce demasiado sabroso para conjuntos extranjeros que conocen que aquí hay
clase de sobra. Y Albentosa es uno más de esa larga lista de nombres que
han triunfado lejos de su país.
El de Alzira, que se prestó con amabilidad a contestar las respuestas de los internautas de Sphera Sports, forma parte de esa estirpe de jugadores que deben hacerse a sí mismos. Ascendió desde Tercera División a la máxima categoría en un viaje que le ha llevado por toda la península, por Inglaterra y Bulgaria. “Me hubiera gustado que me hubieran ayudado con los representantes”, asegura el central cuando la preguntan si cambiaría algo de su carrera. Ahora, afortunadamente, tiene a su lado “una persona honesta.” Sin embargo, pese a algunos malos momentos cree “que todo pasa por algo.”
Aunque le “gustaría estar en LaLiga,” Albentosa afirma que “si tiene que ir al país más lejano por un proyecto bonito” lo hará. Porque esta también es la realidad del fútbol: la de jugadores que deben dejar por un tiempo a sus familias, lejos de su gente, por un futuro mejor. Pese a ello, Albentosa, con una sonrisa, lo tiene muy claro: “España es el mejor país del mundo”.