Disfrutar del momento: este es el leitmotiv de Rafael Nadal. El balear, que ayer ganó un encuentro muy complicado ante Felix Auger-Aliassime, está en esa situación en la que debe comprender a su cuerpo. Sabe que los años pasan, pero la calidad no la pierde. Su triunfo le dio un billete para los cuartos de final de Roland Garros. Ahora se enfrenta al número 1 del mundo: el ínclito Novak Djokovic. “No he jugado este tipo de partidos en los últimos tres meses, así que va a ser un gran desafío para mí. Por supuesto, creo que Novak ya ganó nueve partidos seguidos, ganando en Roma y ahora ganando aquí en sets seguidos en todos los partidos. Probablemente tendrá confianza. Sé cómo es mi situación y la acepto bien. Voy a luchar por ello”, aseguró para los medios.
Cabe recordar que pese a los últimos sinsabores del español el año arrancó de manera espectacular. Venció sus primeros 20 choques en el año y levantó varios títulos épicamente. El más recordado será siempre el Australian Open. “Estoy en los cuartos de final de Roland Garros. Hace dos semanas y media, incluso si tenía buenas esperanzas, esperanzas positivas después de Roma, no sabía si podría estar aquí. Así que simplemente disfruto el hecho de que estoy aquí por un año más. Y siendo honesto, cada partido que juego aquí, no sé si será mi último partido aquí en Roland Garros en mi carrera tenística. Esa es mi situación ahora”, dijo con sinceridad.
Ya hace unos meses, Nadal admitió dolores crónicos que le cuestan incluso tener una vida normal. Ahí sigue, ganando a grandes jugadores del circuito. Rafa es eterno.
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