En ocasiones el ser humano ofrece imágenes de superación rotundas. En este caso, el protagonista es el piloto polaco Drifter Bartosz, quien ha vuelto a sorprender a sus fans durante una prueba de conducción sobre asfalto mojado. Y es que Bartosz no es un piloto cualquiera, ya que no dispone de brazos y se obligado a conducir con los pies a velocidades altas. Un gran ejemplo de superación, sin duda, que logra conducir un coche de carreras sin brazos.