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FC Barcelona

El arquitecto

Volver a verle en el césped del Camp Nou te pone la gallina de piel. A Xavi Hernández se le han visto los ojos brillantes en su presentación como nuevo técnico del FC Barcelona. Una mirada que no cede a contener tantas emociones. Es probable que en una situación tan compleja como la que vive el club en estos momentos no exista un recurso más apasionado que aquel que hurga en la nostalgia. Porque esas cosas, las que llevan consigo un trozo de historia y declaman sobre colores que se sienten, son las que hacen que el balompié vuelva a ponerse romántico. Y no hay nada que guste más a las aficiones que el romanticismo.

A Xavi no se le ve el miedo, sino la valentía de una decisión. La de ir a muerte con aquello en lo que cree. Dispuesto a afrontar este reto bajo una propia exigencia que va a ser innegociable y con el objetivo de impregnar a su vestuario con una idea de juego que debe ser sinónimo de iniciativa. El nuevo técnico del banquillo blaugrana llega con un plan debajo del brazo que es antagónico al Barça pusilánime de los últimos tiempos, confeccionado con bocetos que solo pueden entenderse con el balón, la posesión, el juego de posición y con una clara declaración de intenciones por ser ofensivo. A su proyecto de obra, creado con un libreto de sistemas y variantes que emergen de un modelo de juego, se le añade el desafío de recuperar a sus jugadores. Sobre todo en el aspecto psicológico, para lograr dotarles de una mente ganadora.

Las expectativas a la altura de los rascacielos y las duras exigencias pueden ser malas compañeras. Pues es importante no abandonar la racionalidad y la prudencia. Xavi debe tocar sus teclas y necesitará su tiempo para ajustarlas y hacerlas efectivas. Para extraer lo que esta plantilla puede dar de sí. En todo caso, dispone de un crédito extra que se ganó en el campo. Todo lo que no sea tener paciencia, será, cuanto menos, injusto.

Miles de aficionados han acudido para arropar al de Terrassa en el regreso al que fue su hogar. El que fuera arquitecto de un conjunto que logró exponer su mandato y su método en una época gloriosa y que lleva a sus espaldas un palmarés envidiable, está preparado para ponerse el mono de trabajo. Para que aquella mente ágil y privilegiada se ponga al servicio de la pizarra para diseñar, proyectar y dirigir la construcción de un equipo que necesita erigirse de nuevo. Llevar el escudo en el pecho es lo que hace que no cedas ni una pizca de esfuerzo, que tus ganas se conviertan en tu mejor aliado y que te empuje a venir al Barça en el momento en que este ruega un salvavidas. Aquel jugador que manifestaba una vocación indubitable con su manera de ver y comprender el balompié, ha vuelto. El fútbol no se entiende sin ilusión.

Imagen de cabecera: FC Barcelona

Editora en SpheraSports. Especialista en Scouting y análisis de juego por MBPSchool. Sport Social Media. Eventos Deportivos

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