Los New England Patriots se proclamaron campeones de la Superbowl XLIX que tuvo lugar en el estadio de la Universidad de Arizona en Phoenix.
Los Patriots vencieron en uno de los mejores y más emocionantes partidos de la Superbowl que se recuerdan a los Seattle Seahawks, campeones el año pasado.
Una remontada de diez puntos en el último cuarto, cuatro pases de touchdown de Tom Brady, que ganó su cuarto título, y una intercepción sobre la última yarda en el último minuto permitieron el triunfo de los Patriots. El mayor evento deportivo del mundo volvió a cumplir con las expectativas de espectadores y espectáculo, incluída la apabullante actuación en el descanso de Katy Perry.