Tercer año de la era Maurizio Sarri en el Napoli. El bloque se ha mantenido y las estrellas –Hamsik, Insigne, Mertens, Callejón– continúan en el club. El estilo de juego está totalmente implementado y está alcanzando en este inicio de temporada su máximo grado de perfección.
Juego de posición, balón al piso, juego en uno-dos toques, triangulaciones, posesión, carácter, velocidad y precisión. El Napoli ya no solo es un equipo agradable de ver: también es una máquina efectiva de ganar, que es lo que importante en este deporte.
Comincio a farmi un’idea sulle ragioni che stanno dietro i frequenti silenzi stampa del #Napoli.#Sarri #CityNapoli #Champions pic.twitter.com/CSkxjOPsoK
— nonleggerlo (@nonleggerlo) 16 de octubre de 2017
En Serie A, los partenopeos suman un magnífico pleno de ocho victorias y ocho partidos. Un inicio de récord histórico del club y que apunta a superar las plusmarcas de las nueve victorias de la Juventus 2005/06 de Capello y las 10 victorias seguidas de la Roma de Rudi Garcia a inicio de la temporada 2013/14.
A nivel goleador, el Napoli en Italia es imparable en ataque: 26 goles a favor, más de 3,25 de media por partido, solo en el duelo contra la Roma ha sumado menos de tres goles. Muy distribuidos, además: Mertens con siete goles, Callejón con cuatro, Insigne con tres goles, luego Ghoulam, Koulibaly, Zielinsi, Allan, Milik, Jorginho, Hamsik y Rog.
A esto se une la fiabilidad defensiva adquirida -solo cinco goles encajados en total, apenas siete tiros totales concedidos por partido- y los triunfos en los duelos directos (1-4 contra la Lazio, 0-1 contra la Roma), sin sufrir en exceso. El Inter está a dos puntos, Lazio y Juventus a cinco puntos, la Roma a nueve puntos en la tabla.
En Champions League, el Napoli mostró su peor cara contra el Shakhtar y, tras vencer sin apuros al Feyenoord, se vio completamente desbordado por el Manchester City en la primera media hora de encuentro.
No obstante, en el partido en Manchester el Napoli mostró realmente uno de sus principales puntos de mejora: tras ser completamente avasallados, los partenopeos consiguieron volver a tomar las riendas del partido y asustar al City. El Napoli pudo empatar con un penalti fallado por Mertens y otro anotado por Diawara.
Más allá del resultado, este ímpetu competitivo frente a la adversidad de un Napoli lógicamente inferior al City supone un gran avance para el equipo en Europa. Un paso que también debe tener su reflejo en Italia, tanto en los duelos directos de octubre, noviembre y marzo, como en los partidos contra los ‘modestos’ en los que en los últimos dos años se dejó tantos puntos.
Ante esto, una única duda: ¿le conviene al Napoli ‘tirar’ la Champions para centrarse en un Scudetto que sería histórico?
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