En uno de los escenarios más hostiles del escenario europeo, el Atleti recibió la sentencia que acabaría con sus aspiraciones en la Champions League. Un partido estrambótico, que no controló y le hizo despedirse en Alemania de la máxima competición continental.
Inicio el Dortmund con la clara intención de hincar el diente, pero Azpilicueta no lo permitió. El Atleti también la tuvo, por medio de Morata, que no acertó para permitir ampliar una ventaja que acabaría esfumándose. Antes del descanso, los alemanes ya habían tomado las riendas del marcador (2-0), con tantos de Brandt y Maatsen.
El Cholo agitó la coctelera en el descanso, dando entrada a Barrios, Rodrigo Riquelme y Correa. Sin embargo, fue Hummels el que empezó a declinar la balanza a favor del Atleti, con un gol en propia puerta. Correa, errático en sus oportunidades previas, acabó encontrándose con el gol, poniendo el encuentro en tablas y el resultado global en beneficio de los colchoneros.
El Atleti lo dejó escapar de nuevo. Su falta de solidez a domicilio volvió a estar presente. En tan solo tres minutos, el Dortmund giraría de nuevo el partido. Primero Füllkrug, luego Sabitzer, en un feedback de asistencias y goles que dejó al Atleti demasiado herido.
Con el definitivo 4-2, el equipo español quedó eliminado y sin poder abrir la puerta de las semifinales. El perdón en el Metropolitano, la falta de acierto y la fragilidad defensiva castigaron al conjunto del Cholo. A pesar del desencanto y la frustración, las voces de los aficionados desplazados no se apagaron y alentaron a los suyos tras el trágico desenlace mostrando, una vez más, la lealtad a sus colores.
