El sábado, Marc Márquez lograba su pole número 93 y lo hacía más de un año después. Partía el domingo en la zona más privilegiada de la parrilla y defendió su posición en la salida. Sin embargo, Bagnaia le enseñó la rueda con todas las intenciones y le superó. Trató de corregir Marc, pero se coló y Jorge Martín se benefició de la situación.
El espectáculo de las Ducati estaba servido. Cuando Martín tomó la ventaja, Bagnaia seguía respirándole de cerca. Sin embargo, a falta de 15 vueltas para concluir, el español se fue al suelo y cedió su primer lugar al italiano.
Quedaban 12 vueltas para el final cuando Bezzecchi, que marchaba segundo, se fue largo. Márquez aprovecho el error para acercarse. El acoso surgió efecto con el adelantamiento de Marc, que se ponía segundo en su territorio.
Márquez tiró tanto como pudo; era ahora o nunca. Y acortó las distancias para brindar al público un duelo espectacular junto a Pecco. El de Cervera lo intentó varias veces, pero no fue suficiente. El vigente campeón de MotoGP protegió a la perfección su posición.
El italiano concluyó en lo más alto del cajón, seguido por Marc Márquez y Marco Bezzecchi. Con la caída de Martín, Bagnaia recortó distancias en la general, aunque el español sigue conservando el liderato.
Con el segundo lugar de Marc, el español volvió a saborear un podio y se sitúa en la clasificación a 32 puntos del líder. El de Gresini se desató en el festejo, con baile incluido. El propio piloto, mostró al relevancia de un resultado que le ha devuelto la sonrisa: “Me atrevería a decir que hoy ha sido el mejor podio de mi carrera deportiva. Lo necesitabamos!! Hoy toca bailar juntos. Gracias a todos!!”.
