Síguenos de cerca

Baloncesto

Maccabi Tel Aviv, ¿volver para quedarse?

 

Una bestia dormida. Un equipo que el año pasado bajó a los infiernos de la Eurocup y que no pudo resucitar. Unos jugadores que pasaban sin pena ni gloria por los pabellones de Israel. Un campeón con una estrella fundida. Esta fue la crisis de identidad que asoló la temporada pasada a uno de los grandes equipos de la historia del baloncesto europeo.

518484392

Muchas críticas fluyeron por las calles de Tel Aviv debido al preocupante y pésimo nivel que se podía palpar en “La Mano de Elías”. Tanto fue así, que los macabeos solo fueron capaces de alzarse con la Copa de Israel ante su verdugo en la Liga, el Hapoel Jerusalem. Una “Ligat Loto” (el sponsor paga y manda) que era coto privado de Maccabi, 51 títulos nacionales lo acreditan, y que cayó del lado de los de Jerusalén ganando los dos partidos de la Final. Además, durante la temporada llegaron a perder nueve partidos (cosa impensable) incluyendo derrotas dolorosas como el 91-56 ante Maccabi Haifa o el 68-84 ante el Hapoel Tel Aviv.

El entrenador Guy Goodes fue destituido a mitad de temporada y se hizo cargo del equipo Zan Tabak, que tras 6 partidos con Fuenlabrada ponía rumbo a Israel. No sé si acertado o no, pero viendo los resultados del equipo igual se lo hubiera pensado dos veces el bueno de Zan. Tras un mal papel en la fase de grupos de la Eurocup (eliminado a las primeras de cambio y con solo dos partidos ganados en el grupo) sólo quedaban las dos competiciones nacionales de Israel, que como se ha indicado anteriormente ya sabemos a qué vitrina fue a parar cada título. Y pasó el verano…

469950362

Nueva temporada y nuevas ideas. De la nada al todo en unos meses. Una bestia que empieza a desperezarse y con ansias de levantarse. Un equipo que juega la Euroliga y que parece que ejercerá un gran papel. Nuevos jugadores que ilusionan y que juegan al baloncesto. En definitiva, un campeón al que empiezan a encendérsele las luces. Esto sería más propio del programa televisivo “Cambio Radical” que de un equipo de baloncesto, pero no. Está sucediendo y era necesario.

Tras la desastrosa temporada comentada anteriormente, los directivos de Maccabi decidieron hacerse con los servicios de Erez Edelshtein como capitán del barco amarillo, conocedor de la competición doméstica y asistente de Pini Gershon en Olympiakos hace una década. Respecto a la formación de la plantilla, se han gastado los shéqueles. Pescaron en aguas serbias y se trajeron a los dos mejores jugadores de Estrella Roja del año pasado, Maik Zirbes y Quincy Miller. Contrataron a Colton Iverson para la pintura, jugadores secundarios, pero importantes en el roster y a dos gemas preciosas, Sony Weems y Andrew Goudelock. Los encargados de hacer llover puntos en el aro rival, sin olvidar las tareas defensivas. Alguien al que darle un balón en los últimos segundos de posesión.

En resumen, unos asesinos de defensas de baloncesto. No pinta mal. Con la temporada ya empezada, ha conseguido la victoria en los dos primeras jornadas de la liga israelí y en Euroliga cayó ante Milán, pero dejando buenas sensaciones. El juego acompaña y el equipo da síntomas de tener las cosas claras. Nadie sabe lo qué pasará de aquí a final de temporada, pero la progresión es ascendente y se puede llegar a cotas altas. ¿Campeón de todo en Israel?, ¿Final Four? Todavía es pronto para vaticinar hechos. La naturaleza marca el curso de las cosas, pero quién sabe si Maccabi ha vuelto para quedarse. En definitiva, tan solo es el tercer máximo campeón europeo ¿no?

Foto principal: maccabi.co.il

Comparte la notícia

No te lo pierdas

Más sobre Baloncesto