La Liga rusa de fútbol decidió suspender el estadio del Rostov debido al pésimo estado de su campo de juego y las críticas al césped realizadas por José Mourinho, el técnico del Manchester United. El Estadio Olimp-2 no podrá albergar encuentros de la competición local hasta que los daños sean reparados, informó la Liga rusa, que también decidió suspender al Estadio Centralni en Kazán.
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Ambas ciudades albergarán partidos del Mundial de Rusia 2018 y Kazán será también sede de la Copa Confederaciones 2017. Sin embargo, no se utilizarán para esos eventos los estadios que fueron suspendidos. El Rostov recibió la semana pasada al United en un partido por la ida de los octavos de final de la Europa League que terminó con empate 1-1. Y el pésimo estado del campo despertó duras críticas de Mourinho y sus dirigidos. «Era imposible jugar mejor, imposible hacer una jugada con pases», dijo Mourinho tras el encuentro. El jugador del United, Henrikh Mkhitaryan, en tanto, calificó al césped de «horroroso».
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