El Emirates Stadium vivió el pasado fin de semana el encuentro entre Arsenal y Everton. Un partido que finalizó con triunfo local, permitiendo a los londinenses seguir en la pelea por los puestos europeos. La mascota del Arsenal, Gunnersaurus, portó una cámara de vídeo en primera persona grabando todo aquello que las cámaras de televisión no mostraron.