Con su triunfo en Génova, la Juventus se aseguró el triunfo en la Serie A, que supone el cuarto Scudetto consecutivo del conjunto bianconero.
Futbolistas y aficionados lo celebraron con efusividad. Eso sí, nada de grandes fiestas, puesto que la Juventus todavía tiene por delante los retos de las semifinales de Champions League y la final de Coppa Italia.