Bastian Schweinsteiger fue protagonista el pasado fin de semana con el Bayern de Múnich. El conjunto bávaro ganaba de forma autoritaria contra el Augsburg con un claro 0-4 a domicilio, pero fue el centrocampista alemán quien dejó una de las imágenes más curiosas del choque, cuando fue sustituido y gastó una broma a su compañero Rafinha, que la realización televisiva cazó.