El piloto español consigue su primera victoria en Fórmula 1 tras una carrera que no dejó indiferente a nadie. El GP de Silverstone siempre quedará en su memoria como la pista en la que consiguió llegar a lo más alto del podio.
El piloto madrileño de Ferrari salía el primero de la parrilla después de marcar el mejor tiempo de la clasificación. Ayudado por los fallos del coche de Max Verstappen durante la carrera y de un Safety Car cuando todo parecía perdido, Sainz se aprovechó de la estrategia al cambiar neumáticos a unos más blandos y situarse detrás de su compañero de escudería, Charles Leclerc, quién lideraba la carrera pero con un juego de neumáticos mucho más duros. Una vez reanudada la carrera, Sainz no tardó en adelantar a su compañero y en situarse en primera posición cuando apenas quedaban vueltas. Sainz se convirtió en el segundo piloto español de la historia en lograr una victoria de Fórmula 1 tras Fernando Alonso, que quedó cerca del podio (P5).
Por otra parte, la carrera estuvo marcada por el grave accidente en la salida del piloto de Alfa Romeo, Zhou Guanyu, que recorrió varios metros con el coche del revés hasta chocar con la valla y que provocó la bandera roja durante aproximadamente 55 minutos. Por suerte, el piloto chino no sufrió daños, gracias, en gran parte, al halo del coche que protegió a Zhou de impactar su cabeza con el suelo, un impacto que podía haber sido mortal.
Imagen de cabecera: Scuderia Ferrari
