Un año más se ha confirmado lo que viene siendo una evidencia: la implantación del Gran Premio de Singapur en el precioso trazado nocturno de Marina Bay fue todo un acierto. Es más, hasta en una temporada descafeinada como la actual esta carrera sigue con la capacidad de deparar sorpresas y emociones inesperadas. Es un circuito donde las manos del piloto importan más que en ningún otro, y solo así se puede justificar el espectacular dominio de Sebastian Vettel durante todo el fin de semana, que ha concluido con una fantástica victoria del piloto alemán que le sitúa únicamente a ocho puntos de Nico Rosberg en la clasificación del mundial.
Mercedes fue sin duda la gran decepción. Su rendimiento fue inesperadamente bajo, clasificando en quinta y sexta posición en la clasificación del sábado. La cosa no mejoró en carrera, ya que Rosberg únicamente pudo ser cuarto mientras que Lewis Hamilton tuvo que retirarse por problemas en el motor. Nico vuelve a acercarse a su compañero de equipo, pero la diferencia de 41 puntos y sobre todo el mejor desempeño del inglés parece que no deja lugar a una posible remontada de Rosberg. Ante el descalabro de Mercedes fueron Ricciardo y Raikkonen quienes se aprovecharon para acompañar a Vettel en lo más alto del podio.
Por detrás destacable la actuación de los Toro Rosso. Ambos se volvieron a ver envueltos en problemas, Verstappen al quedarse clavado en la salida y Sainz por una pérdida de potencia temporal. Pero aprovechando el oportuno Safety Car que provocó un individuo que, desorientado, saltó al circuito, ambos consiguieron remontar con el neumático superblando, para terminar octavo y noveno. La polémica también rodeó al equipo en las últimas vueltas, cuando desde boxes indicaron al holandés que permitiese pasar a Carlos Sainz, a lo que Verstappen se negó.
La cara amarga volvió a ser McLaren-Honda, que una carrera más tuvo que abandonar con sus dos coches, ambos por problemas en la caja de cambios. Tanto Fernando Alonso como Button rodaban en zona de puntos, evidenciando en buen rendimiento del coche en este circuito, pero la mecánica les dejó tirados a ambos, aunque Jenson incluso tuvo tiempo antes a chocar contra un alocado Maldonado. El otro accidente de la carrera lo protagonizaron Felipe Massa y Nico Hulkenberg, en una maniobra que provocó el primer Safety Car de la carrera y que se saldó con una penalización de tres posiciones en parrilla para el alemán.
Por último, la peor noticia de la carrera fue la no participación de Roberto Merhi, a quien el equipo Manor decidió reemplazar por Alexander Rossi. El estadounidense ha aportado contribución económica y correrá cinco de las siete carreras restantes. El piloto español por su parte solo disputará dos pruebas más, los Grandes Premios de Rusia y de Abu Dhabi. Dentro de siete días vuelve la Fórmula 1 en Suzuka, uno de sus circuitos más legendarios y en el que el recuerdo del terrible accidente de Jules Bianchi hace un año estará muy presente.
