Lamentables imágenes las que se produjeron en la tercera categoría del fútbol brasileño. Ferreira, futbolista del Guaraní, entró en estado de ira después de que el árbitro le mostrara la tarjeta roja por propinar un codazo a un rival. La reacción del futbolista brasileño fue ir a por el colegiado y empujarle violentamente contra el suelo. Los compañeros de Ferreira intentaron calmarlo pero su estado de ira se prolongó durante varios minutos, siendo necesaria la intervención de la policía para sacar al futbolista del terreno de juego.