Hay trabajos en la vida por los cuáles se cobran unos grandes incentivos, esos trabajos que por lo especial del puesto, o por la peligrosidad que conllevan sus ejecuciones se retribuyen con un plus de salario. En esa categoría, de peligrosidad, se debería de plantear incluir a los entrenadores de Liga BBVA, que ven como año a año van dejando sus proyectos a medio hacer y sus puestos libres en beneficio de otros compañeros.
El único entrenador de Primera División que sopló las velas en su tercer año en el mismo club, ha sido Diego Pablo Simeone, el argentino ha cambiado la tendencia del club madrileño y le ha hecho participe de grandes éxitos durante su andadura al frente del equipo rojiblanco. De ‘sobrevivir’ al final de esta campaña, habrá tres entrenadores más que cumplan su tercer aniversario en el mismo equipo, los casos de Fran Escribá, Gaizka Garitano y Paco Jémez son las excepciones del fútbol humilde que normalmente en una dinámica negativa de derrotas pueden verse en la calle.
Dos entrenadores que firmaron a comienzos del 2013 fueron Unai Emery con el Sevilla y Marcelino con el Villarreal. El donostiarra saboreó las mieles del triunfo con la conquista de la Europa League, mientras que García Toral ascendió al ‘submarino amarillo’ a la Primera División y lo ha colocado en posiciones europeas.
Solo dos entrenadores que fueron contratados en el período estival del año pasado continúan hoy en sus equipos, Ernesto Valverde llevó a los ‘leones’ a jugar la Liga de Campeones de esta edición y Carlo Ancelotti que logró Champions y Copa del Rey en la pasada temporada.
El verano pasado en la Liga BBVA fue bastante movido en los banquillos, hasta ocho equipos dejaron sitios libres en sus banquillos, unos fueron ocupados con entrenadores en activo de otros equipos de Liga BBVA, como fue el caso del FC Barcelona que contrató a Luis Enrique (Celta de Vigo), el Málaga a Javi Gracia (CA Osasuna) o el Granada CF que contrató a Joaquín Caparrós (Levante UD). Otros banquillos fueron ocupados con entrenadores en paro, de otras categorías o de otras ligas; Eduardo Berizzo (O’Higgins), Sergio González (Espanyol B), Nuno Espirito (Río Ave), Víctor Fernández (paro), José Luis Mendilibar (paro).
Durante el curso, han llegado los temidos ceses, destituciones, dimisiones de todos los años, la marcha de un compañero y la oportunidad para uno nuevo de reconducir la situación del equipo. Así llegó Lucas Alcáraz sustituyendo a Mendilibar, que apenas pudo pasar 3 meses en el Mediterráneo español. También desembarcó ‘The Chosen One’ a San Sebastián, el escocés Moyes está intentando revertir la situación de una plantilla que aspiraba a cotas mayores que la mitad de la tabla. Igualmente, Juan Ignacio Martínez logró trabajo en Almería sustituyendo a un correcto Francisco, y Miroslav Djukic, que ha visto como hace un par de semanas hacía las maletas de nuevo tras su mala experiencia en Mestalla. Abel y Quique (dos ex – rojiblancos) cogieron la difícil tarea de salvar a Granada y Getafe, aunque Sánchez-Flores decidió dar un paso al lado y el Getafe le sustituyó por Pablo Franco. El último entrenador que ha debutado en Primera División ha sido José Antonio Romero que debutó a sus 55 años en la máxima categoría del fútbol nacional con el Córdoba CF tras la destitución de Djukic y tendrá la complicada tarea de frenar la caída libre de un Córdoba que lleva 8 derrotas consecutivas.
Con esta situación, la permanencia media de un entrenador en Liga BBVA sin cambiar de equipo se sitúa en los 466 días, es decir, una temporada completa y unos meses de una nueva campaña. Veremos este verano cuando se cumplan o no objetivos, quien deja sitio libre en un banquillo y quien es capaz de aferrarse a él con el sentir del trabajo bien realizado, todo sea por librarse de la decisión de un grupo de trajeados directivos que no dudarán en salvar su pellejo de una dudosa gestión con tal de servir al aficionado en bandeja al técnico culpable de la marcha de un equipo.
Entrenadores Liga BBVA | Elaboración propia
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