En busca de una oportunidad

La carrera de Robert Kubica dio
un giro radical el 6 de febrero de 2011 cuando un grave accidente en el Rallye
“Ronde di Andorra” estuvo a punto de acabar con su vida. El piloto polaco
perdió el control de su Skoda Fabia en una de las curvas más peligrosas del
trazado y acabó estrellándose contra un guardarraíl que acabaría atravesando el
coche. El accidente le dejó graves secuelas en su mano derecha, en la que
perdió gran parte de movilidad y sensibilidad. Han pasado siete años de aquel
accidente y Kubica sigue manteniendo intacto un sueño que tiene desde aquel
día: volver a la Fórmula 1.

Durante los últimos tres años se
ha especulado mucho con su vuelta a la Fórmula 1, un rumor que avivó tras su
vuelta al Mundial de Rallyes en 2013. Sin embargo, Robert Kubica repitió en innumerables
ocasiones que no se encontraba bien físicamente para volver a competir. Hasta
este año. El ex piloto de BMW Sauber y Renault ha estado siguiendo muy de cerca
la elección de los asientos de Renault y Williams, donde incluso ha estado
realizando algunos test. En las últimas carreras de la temporada pasada era
frecuente ver al polaco caminando por el paddock, charlando con alguno de sus
antiguos compañeros o siguiendo muy de cerca las evoluciones de Renault y
Williams. “He estado trabajando mucho en estos diez últimos meses, he bajado
mucho mi peso y me siento muy bien. Pero la decisión no depende ya de mí, así
que solo queda esperar y observar qué pasa”, declaraba el polaco para Autosport.

Kubica sigue intentado encontrar
una oportunidad para volver al Gran Circo. Una oportunidad que estuvo cerca de
cumplirse este invierno cuando Paddy Lowe, director técnico de la escudería
Williams, le dio la oportunidad de realizar unos test con el equipo de Grove en
Abu Dhabi. El piloto polaco realizó unos test notables, pero la escudería
británica confirmó a principios de enero que Sergey Sirotkin sería el segundo
piloto titular -junto a Lance Stroll- de cara a la temporada 2018.

Su vuelta está cada vez más
cerca. Esta temporada actuará como piloto reserva de Williams, un puesto
importante para volver a entrar poco a poco en contacto con el coche y las nuevas
normas que han ido entrando en las últimas temporadas. Si es paciente y ninguno
de los dos pilotos titulares da la talla, volveremos a ver al polaco desplegar
todo su talento en la Fórmula 1. Porque lo que está claro es que a Robert
Kubica, aun no teniendo la mano derecha al cien por cien, le sigue sobrando
talento para competir en una categoría en la que enamoró con BMW Sauber.