El último suspiro de Lautaro

Riad acogió de nuevo una Supercopa. En esta ocasión, la italiana que, por tercer año consecutivo, se disputó en tierras saudíes. El duelo, que enfrentaba al Napoli y al Inter, arrancaría con la triste noticia del fallecimiento de Gigi Riva, el histórico goleador de la selección italiana. Como ya sucediera con Franck Beckenbauer, las gradas no respetaron el minuto de silencio.

La grandeza del fútbol italiano se construyó con el desempeño de grandes jugadores durante décadas.

Pocos, muy pocos, mejores que Riva.

Descanse en paz, Gigi.
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— Sphera Sports (@SpheraSports) January 22, 2024

El Inter llegaba como favorito, con una regularidad y rendimiento mucho más favorable que el de su rival, que dista de las sensaciones que obtuvo el pasado curso coronándose con el Scudetto 33 años después de su último campeonato.

Tras una primera mitad con el marcador a cero, arrancó el segundo acto con más intensidad. Fue en el minuto 60 cuando Giovanni Simeone vio la segunda amarilla que dejaría con diez al conjunto partenopeo.

El gol que le dio al Inter el título llegaría en el tiempo de descuento, con un gol agónico que transformó Lautaro Martínez. El argentino, símbolo de los ‘nerazzurri’, ha marcado en las últimas tres finales de la competición que ha disputado el equipo de Milan. Con este nuevo título, el Inter suma la tercera Supercopa consecutiva y la octava de su palmarés.

Quante volte lo avete rivisto?

🔥 Tante
✨ Troppe
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— Inter (@Inter) January 23, 2024