El tic tac de Vitolo

Apenas 10 minutos fueron necesarios para comprobar que Vitolo tiene algo más que el resto. Y es que, el canario aportó más en esos pequeños compases de partido que Thomas Lemar, su competidor por un sitio, en lo que va de curso, más allá de un buen debut en la Supercopa de Europa y un par de chispazos en Getafe.

Consumido por las lesiones que le acompañan desde que llegara al Atlético y que le han impedido rendir y jugar con regularidad, Vitolo compareció como titular ante el Levante en una decisión que se pedía a gritos desde todos los sectores del club, toda vez que el ex del Sevilla solo había aparecido en el once inicial en dos ocasiones en lo que va de curso, sendos partidos poco atractivos contra el Sant Andreu en Copa del Rey.

Y por mucho que lleve Simeone probando al chico en la mediapunta como acompañante de Griezmann en los últimos entrenamientos, optó por darle algo más de una hora en su hábitat natural, la izquierda. En solo diez minutos, ya había generado una ocasión de gol en la que Griezmann besó el palo y Koke introdujo el balón en la red en un tanto que acabó siendo anulado con cierta polémica mediante el VAR.

Acostado en la banda siniestra, con su peculiar forma de conducir el balón cambiándoselo de pierna con ese tic tac tan característico, manejando el tempo de la jugada y haciendo dudar al rival de cuál va a ser la solución a tomar, Vitolo generó una ocasión tras otra, recibió más faltas que nadie y no se cansó de asociarse con Koke, Correa y un Griezmann que no estuvo tan lúcido como acostumbra en los metros finales. Además, incluso, se permitió el lujo de casi marcar un golazo con un disparo desde la frontal.

Ante la ausencia de Saúl por acumulación de tarjetas y la presencia de Correa en punta, posición para la que parece avocado hasta que vuelva Diego Costa, la competencia del canario se resumía en un Lemar que no termina de arrancar y un Gelson recién operado de vegetaciones que tampoco es una opción primaria para Simeone.

El recital de Vitolo, posiblemente el mejor jugador rojiblanco sobre el campo, abre nuevamente el abanico de posibilidades para el técnico argentino, que necesita lucidez de los suyos en la parte decisiva del campo, toda vez que Griezmann es el único envuelto en la tarea del gol en las últimas semanas. Y si no sucede nada extraño, el que fuera internacional con España y que necesita regularidad para recuperar ese sitio, debería seguir en los planes importantes del equipo rojiblanco en los próximos envites. Se lo ha ganado por méritos propios.