El reto de KTM

La marca austriaca KTM se consolidó a principios de los 90
aunque su origen se remonta a 1934. Desde el principio de sus tiempos, además
de diseños comerciales para carretera, tuvo puesto su punto de mira fijamente
en la alta competición. La suerte de compartir país natal con la gigantesca
multinacional Red Bull le ayudó a ganar prestigio y publicidad así como poderío
económico a la hora de firmar pilotos.

En el Dakar, KTM ha implantado una dictadura en la categoría
de motos que difícilmente le será arrebatada. Desde 2001 ha ganado todas las
ediciones un piloto sobre la montura austriaca. Son 17 victorias consecutivas
puesto que la edición de 2008 fue suspendida y ha contado con los mejores
pilotos del mundo como pueden ser Nani Roma, Cyril Despres, Fabrizio Meoni o
Marc Coma.

KTM llegó al Campeonato del Mundo de Velocidad a principios
de siglo XXI. Comenzó en la categoría más pequeña, por aquel entonces aun
125cc, y logró victorias de inmediato. Mika Kallio fue uno de los pilotos más
fieles a la marca austriaca y sobre ella consiguió varios subcampeonatos, un
tercer puesto en 250cc y numerosos triunfos en carreras. Con el cambio de
categorías a Moto3 y Moto2 KTM ha dado un paso adelante.

Desde 2012 ha sido la moto que ha dominado en la categoría
más pequeña; logrando cuatro títulos de marcas y dos subcampeonatos de seis
disputados y decenas de victorias en carreras convirtiéndose en una de las
monturas de referencia para los jóvenes pilotos con talento que quieren ser el
nuevo Marc Márquez o Valentino Rossi. En la pasada temporada 2017, KTM quiso
aumentar su patrimonio en el Mundial e introdujo equipos en Moto 2 y MotoGP con
resultados dispares.

En Moto2 es muy complicado echarle el guante a Kalex, la
gran dominadora de la categoría desde su creación, pero ya ha conseguido varias
victorias de la mano del portugués Miguel Oliveira y está creciendo poco a poco
para asaltar algún día el título. En MotoGP la situación es bien distinta.
Honda, Yamaha y Ducati están a años luz y luchar contra pilotos como Rossi,
Lorenzo, Márquez, Pedrosa o Viñales parece una quimera. La mejor posición que
lograron fue un 9º puesto. Bradley Smith y Pol Espargaró son dos pilotos de
gran nivel, pero a día de hoy la distancia es enorme. El reto de KTM es lograr,
a corto plazo, reducirla y subir al podio en la categoría reina. Lo harán, con
el apoyo de Red Bull y tiempo. Como lo hizo Ducati. La pregunta es cuándo.