La temporada soñada de Rafael Nadal llegó hoy a su final de la peor manera. El español se retiró del Masters de tenis de Londres después de perder ante el belga David Goffin en un encuentro en el que jugó más allá de los límites tolerables del dolor en su rodilla derecha.
«Estoy fuera, mi temporada ha terminado», dijo el número uno del mundo en sus dos primeras frases de la rueda de prensa posterior a la derrota ante Goffin por 7-6 (7-5), 6-7 (7-4) y 6-4 en el O2 Arena. «He hecho lo posible para jugar, pero ya está. No puedo seguir«, comentó Nadal tras un partido en el que mostró evidentes problemas de movilidad.
El español luchó con orgullo y salvó cuatro puntos de partido en el segundo set, pero el dolor era demasiado para lograr la remontada y terminó sucumbiendo tras dos horas y 37 minutos de drama. «A jugar con dolor estoy acostumbrado, el problema es cuando el dolor es más de lo que uno puede aguantar y se convierte en una limitación total».
El español llegó al Masters entre algodones debido a una sobrecarga en el tendón rotuliano de la rodilla y, según reconoció ante los medios, durante el mismo partido ante Goffin se dio cuenta de que no iba a seguir más allá del partido de hoy. Perdiera o ganara.
«No es una decisión que haya tomado hace cinco minutos. La he tomado durante el partido, aún perdiendo o ganando iba a renunciar», afirmó. «No merecía pasar dos días más así en el court después de la temporada que he tenido. Me siento muy decepcionado, pero no voy a llorar, he tenido una gran temporada», comentó el español.
De esta manera, Nadal cierra de la peor manera una temporada excepcional. Ganó seis títulos, incluyendo su décimo Roland Garros y el Abierto de Estados Unidos, y terminó como número uno del mundo por cuarta vez en su carrera. Sin embargo, no pudo saldar la cuenta pendiente con el Masters, un certamen que nunca pudo obtener en su carrera.
«La temporada ha sido soñada, hubiera pagado mucho dinero por vivir una temporada así», expresó. «Pero no me gusta terminar así, claro que no».
Su lugar será ocupado por el también español Pablo Carreño, que ingresó al certamen como suplente y el miércoles se enfrentará al austríaco Dominic Thiem, que perdió este lunes más temprano ante el búlgaro Grigor Dimitrov por 6-4, 5-7 y 7-5 en el primer encuentro del Grupo Pete Sampras.
«Para mí esto es cruz total, pero que me reemplace un muy buen amigo del circuito como Pablo es una buena noticia. Le deseo lo mejor, ojalá pueda disfrutar estos partidos y hacer un gran papel», dijo.
Nadal reconoció además que realizó un «tratamiento a la desesperada» en su rodilla tras renunciar hace diez días al Masters 1000 de París. El dolor, que se manifestó por primera vez en el final de la gira asiática, le impidió participar en Basilea y le obligó a retirarse antes de su duelo de cuartos de final de París ante el serbio Filip Krajinovic.
El español visitó de urgencia en Barcelona a Ángel Ruiz Cotorro, su médico de confianza, quien certificó que no es una lesión en principio grave y que se trata de una sobrecarga producto de la acumulación de encuentros en la temporada. Nadal decidió entonces hacer el intento de jugar en Londres, pese a que dentro de su equipo hubo quienes se oponían a la idea. El deseo de jugar un torneo que nunca pudo ganar y al que tantas veces debió renunciar terminó primando.
«Fue decision mía estar aquí. Había parte del equipo que pensaba que era mejor poner fin a la temporada«, reconoció. «Mi compromiso era intentarlo. Es un evento que me he perdido demasiadas veces en mi carrera, pero así es como ha sido mi carrera», afirmó. «Ahora espero realizar el tratamiento adecuado. A desconectar unas cuantas semanas y cuando la rodilla lo permita empezar tranquilamente y hacer las cosas progresivamente», señaló. «Intentaré llegar bien preparado al Open de Australia, que es el gran objetivo«.
Tras el golpe que significa la renuncia de Nadal, el Masters continuará este martes con la actividad del Grupo Boris Becker, en el que el croata Marin Cilic se medirá al estadounidense Jack Sock, y el suizo Roger Federer al alemán Alexander Zverev.
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