Desde su desmayo en la Eurocopa 2020 ha crecido el amor por Christian Eriksen. Algunos le aman tanto que incluso cambian sus ganas de bulla en cuanto le ven la cara. Le ocurrió a Brandon Williams en un choque en la Premier League. Cayó al suelo con el danés y cuando estaba a punto de pelearse vio que Eriksen era su rival. Solo le quería abrazar. Seguro que has visto el vídeo, ya que es el típico clickbait que aprovechan los medios para ganar visitas. ¡Tienes que verlo!, te dicen en el titular del artículo. Un clásico.
El caso es que puede que ese cariño por el todavía futbolista del Brentford esconda una especie de ternura por alguien que todavía está para ser un jugador de Champions League. Así, tal cual. Quien no le haya visto jugar, quizás, cree que ya que su vuelta a los terrenos de juego es una buena noticia. Nada más lejos de la realidad: el danés tiene ofertas importantes y sigue llamado a liderar proyectos mastodónticos. De hecho, la propuesta del Manchester United, que anuncia Fabrizio Romano a bombo y platillo, es una consecuencia del juego que ha mostrado en el cuadro de Thomas Frank. Qué jugador.
Eriksen era un mediapunta brillante en sus momentos de efervescencia en el Tottenham y en el Ajax. Sin embargo, sus últimos años en el verde le han transformado en un fino interior de los que ayudan en la base de la jugada. El ya todocampista forma parte de esa estirpe de jugadores que entienden a la perfección cuándo deben jugar pases en corto para atraer por un lado para acabar cambiando el juego al hombre libre. Si le das libertad en tu pizarra, seguramente, tu equipo será mucho mejor. Y eso vale muchos millones.
Es un caramelo escandaloso para los grandes clubes europeos por su situación contractual. Parece ser que no tiene ninguna prisa en decidir su futuro, esperando a que las entidades hagan sus traspasos para ver bien dónde puede encajar. Ya es una evidencia que Eriksen no es ese perfil de futbolista que bastante tiene con recuperarse de una situación crítica. A sus 30 años está en un momento clave de su carrera: no puede equivocarse. Quien le firme, seguro, no va a cometer un error.
Imagen de cabecera: @BrentfordFC
