Síguenos de cerca

Bundesliga

El Águila que quiere convertirse en Fénix

Al borde del descenso. Así estuvo el Eintracht Frankfurt la pasada temporada. Y es que no iba nada bien. Falta de gol, lesiones de gente importante, problemas de salud que conmocionaron a los aficionados, cambio de entrenador… Cuando un equipo no va bien, muchos pueden ser los motivos que provoquen dichos resultados o que se conviertan en consecuencias que empeoren el panorama. Al final todo quedó en un susto. Un gol de Haris Seferovic significó la estancia, un año más, del club del Commerzbank-Arena como equipo de la máxima categoría del fútbol alemán. Ese fue el desenlace final de la Relegation, pero en la ida el panorama estaba muy negro. Regresaban a los terrenos de juego Marco Russ (de baja tras detectársele un tumor) y Alexander Meier, cuya temporada 2015-16 fue para olvidar, ya que venía de quedar Máximo Goleador y pasó a estar lesionado durante media temporada.

Pasando página, la nueva temporada empezará en unas semanas y los Kovac tienen ante sí un proyecto que combina gente joven y veteranos curtidos en mil batallas. Para empezar, Meier renueva y seguirá, si las lesiones se lo permiten, siendo la referencia ofensiva del equipo. ¿Hay vida más allá de Meier? Deben mejorar mucho Seferovic, Marco Fabián o Castaignos para tener opciones de ser titulares. A eso se le une la llegada del sueco Branimir Hrgota (23), procedente del Borussia Mönchengladbach, que buscará reivindicarse. Ese será uno de los grandes problemas que Niko Kovac debe resolver en el Eintracht Frankfurt para la 2016-17, la alarmante falta de gol. Sí, porque acabar una liga con una media de un gol por partido es muy pobre. Tan solo Hannover 96 (colista) y FC Ingolstadt (debutante, revelación y 11º clasificado) marcaron menos goles que el SGE la pasada temporada. Para uno de los dos clubes fue suficiente; para el otro, la sentencia. No hay que olvidarse tampoco de Marc Stendera, una de las jóvenes promesas del fútbol germano, que a sus 20 años ya tiene que empezar a coger galones en el equipo y hacerse un hueco entre los importantes. De momento es el canterano del actual Eintracht Frankfurt, pero no ha llegado a dar el paso serio que le coloque entre los nombres importantes del equipo.

 

La portería seguirá siendo para el internacional finés nacido en Eslovaquia, Lukas Hradecky. El guardameta llegó en silencio y tras las salidas de Kevin Trapp rumbo a París y Felix Wiedwald al Werder Bremen, el elegido para los 34 partidos de la temporada fue Hradecky, algo que, con toda probabilidad, pasará también en ésta. Con la portería cubierta, el resto de zonas del campo debían ser reforzadas. Con el capitán renovado, los nuevos refuerzos llegaron de clubes como la Fiorentina, el Real Madrid o el Manchester United. Los ingleses han cedido al uruguayo Guillermo Varela (23) para su lateral derecho. El Real Madrid, por su parte, cede a Jesús Vallejo (19) y vende, con opción de compra, a Omar Mascarell (23), jugadores que en el primer equipo no tienen sitio, pero que en sus últimas temporadas han cuajado buenas actuaciones. De echo, aún Jesús Vallejo no ha debutado en Primera División, pero se convirtió en capitán de las categorías inferiores de la selección aún siendo más joven que sus compañeros. El canario, por su parte, busca el escaparate para poder ganarse un gran contrato en un club en su segunda experiencia fuera del fútbol español, tras el año en el Derby County inglés.

A ellos tres se les unió Ante Rebic (22), jugador croata cedido por el equipo de Florencia, que podría ser el encargado de acompañar a Alexander Meier en el ataque de las Águilas, sobre el papel, si el nivel de los otros jugadores sigue igual al del año pasado. Si hablamos de sorpresas, la incorporación más sorprendente y, quizás, una de las más sorprendentes de todo el mercado veraniego fue la contratación de Taleb Tawatha (24), todo un gran desconocido para el gran público, que fichó por poco más de un millón de euros del Maccabi Haifa israelí para ocupar el lateral zurdo, haciéndole competencia a Bastian Oczipka.

 

Los nombres no dicen nada ni aseguran goles. Lo que sí está claro es que, después de la tormenta, siempre llega la calma y en Frankfurt del Meno ya la pasada temporada e, incluso, hace cuatro, la tempestad causó alguna que otra catástrofe. Ahora toca reciclarse e iniciar de cero. Olvidar el pasado y mirar hacia delante. A partir de ahora, las Águilas desean convertirse en Fénix, el ave que resurgió de sus cenizas. Será complicado llegar a imitar a aquel Eintracht de los 70 y los 80, campeón de cuatro Copas. O peor aún, repetir la hazaña de 1960, cuando Dieter Lindner y compañía llegaron a la final de la Copa de Europa ante el Real Madrid y, aunque acabaron siendo goleados (7-3), nadie les puede negar que allí estuvieron, disputando una final continental. La que sí ganaron fue la Copa de la UEFA de la 1979-80, ante el Borussia Mönchengladbach. Habrá que rememorar el espíritu de décadas anteriores para hacer que el Eintracht Frankfurt deje de sufrir y afronte una temporada de la mejor manera posible. Hay juventud, hay ganas y hay calidad. Otra cosa es tener suerte. La necesaria para sumar algún punto más de los que te permite sumar el juego.

Por otra parte, la gran novedad del Eintracht Frankfurt 2016-17 no está en los nombres, sino que será notable para la vista. Toda una vida vistiendo a rayas, mezclando rojo y negro… Eso ya ha terminado. La primera equipación del Eintracht Frankfurt cuenta con el rojo, únicamente, en las medias y en algunas tiras de la camiseta (cuello, marca deportiva y escudo). A su vez, el escudo cambiará de color en la 2ª equipación, ya que pasará de ser rojo a ser negro. En la 2ª, el rojo sí será el protagonista, ya que será el color predominante en toda la ropa. Nueva cara, nuevos nombres, ilusiones renovadas. En el Commerzbank Arena no quieren ya volver a hablar sobre la Relegation o el descenso, quieren pasar página y no pasar apuros. Queda muy claro, el Águila quiere convertirse en Fénix y volver a ocupar un puesto entre los mejores.

Puerto de la Cruz (Tenerife), 1983. Bloguero en fase de evolución. Amante del fútbol global, blanquiazul de corazón y rossonero por aficción a este señor deporte. Conocido en el mundillo como "Humilde Aficionado". El balón, nuestro mejor amigo.

Comparte la notícia

No te lo pierdas

Más sobre Bundesliga