Ahora si: El Éibar se ha salvado no por el descenso administrativo de ningún equipo, no. Si sigue una temporada más en Primera División es porque se lo ha ganado a pulso. Dejó pasar las jornadas en el tramo final, pero no hay duda de que el conjunto armero ha sido una de las revelaciones del campeonato.
Tenía pinta de equipo simplón que volvería a Segunda en menos que canta un gallo, pero hombres antes desconocidos como Borja Bastón, Keko, Inui o Sergi Enrich han demostrado que no todo son estrellas en la Liga y que hay sitio para el pequeño que se esfuerza.
Posición: 14º (43 puntos)
Balance: 11 victorias, 10 empates y 17 derrotas, 49 goles a favor, 61 en contra.
Dato: En la jornada 24, el Éibar había logrado más puntos (36) que en toda la temporada anterior (35).
El mejor: Borja Bastón. Era su primera temporada en Primera División, y el delantero cedido por el Atlético de Madrid ha marcado más goles que Jackson, que Vietto, que Torres y casi hasta que Griezmann. Goles más meritorios si cabe en un equipo de perfil bajo. Hay delantero para rato en el Manzanares.
Máximo goleador: Borja Bastón (18 goles)
Once con más minutos: Riesgo; Ander Capa, Dos Santos, Ramis, Juncá; Dani García, Escalante, Adrián González, Keko; Sergi Enrich, Borja Bastón.
Temporada: Con su victoria por 1-3 ante el Granada en la primera jornada, el Éibar se colocaba como líder de Primera División tan solo unos meses después de salvarse del descenso a Segunda en los despachos. Iba a ser la premonición de una primera vuelta absolutamente meritoria.
No perdió hasta la cuarta jornada, ante el Atlético, tras ganar al Athletic (2-0) y empatar en Málaga (0-0). Dos empates más y una victoria en Las Palmas (0-2) le convertía en uno de los equipos de inicio de campeonato. Y es que los armeros solo perdían ante los grandes. En los 13 primeros partidos, solo perdió ante Atlético, Barça y Real Madrid.
En la jornada 11, en Ipurúa ya se soñaba con Europa. Y aunque llegó el bajón esperado (cinco partidos sin ganar), el 2-0 ante el Sporting y sobre todo el 0-4 ante el Betis (la mayor goleada de la historia armera en Liga) encumbraron al equipo de Mendilíbar, que ya recibía elogios de todo el país.
La victoria ante el Espanyol (2-1) puso la guinda a 19 grandes partidos. El Éibar acabó la primera vuelta con 30 puntos, solo cinco menos que en toda la temporada anterior, y en sexta posición, con hombres como Keko Goltán o Borja Bastón en un gran estado de forma.
Y la segunda vuelta empezó incluso mejor que la primera: con un espectacular 5-1 al Granada. El descenso estaba ya a 17 puntos a mitad de enero, por lo que la máquina empezó a aminorar. Tres derrotas seguidas antes de la victoria ante el Levante (2-0) y cuatro derrotas consecutivas más. De repente, el Éibar ya estaba en tierra de nadie.
No por eso regaló puntos. Empató ante equipos que luchaban por el descenso (Rayo y Getafe) y ganó a la Real Sociedad (2-1) para conseguir pleno de victorias ante los rivales vascos en Ipurúa. El empate ante el Deportivo sellaba una permanencia histórica a tres jornadas del final. Por méritos propios, el Éibar es de Primera.