Vaya duelo fue el Atlético de Madrid vs Barcelona, por momento hasta pareció un combate de lucha, ya sabéis a lo que me refiero. El Barça se llevó tres puntos de oro del Metropolitano que le permiten tomar ventaja respecto a su principal perseguidor y eterno rival, el Real Madrid, que perdió en casa del Villarreal. Sonará a topicazo pero más que una victoria fue uno de esos partidos que se recuerdan una vez conquistado el título de Liga. Todavía es muy pronto y pueden pasar muchas cosas, el Barça también perderá partidos y el Madrid es un duro rival. Nada está decidido y eso es lo bonito.
Los de Xavi salieron realmente enchufados al partido. En los primeros 30 minutos el dominio culé fue evidente, con circulaciones rápidas y precisas y acaparando la posesión. Ese dominio los llevó a ponerse por delante en el que sería el único gol del partido. Y quiero aprovechar este momento para hablar de Pedri, que no saldrá en las estadísticas como goleador ni como asistente pero medio gol es suyo. No es ningún secreto que este chico es buenísimo pero cuando tiene un balón en los pies no hace más que recordárnoslo. El movimiento que hace en el gol para generar la ocasión es tremendo: recibe el balón, busca opciones sabiendo el espacio que tiene por delante, esconde la pelota haciendo ver que no va a ser un pase vertical -y efectivamente, no fue un pase- y arranca en conducción saltando la línea de Koke-Barrios que tenía por delante. Con Ansu y Gavi hundiendo a los centrales, el espacio entre las dos líneas era considerable. Una vez atrae a los rivales en la frontal del área, cede para Gavi, que protege perfectamente el balón para girarse, que a su vez cede para Dembélé, totalmente libre dentro del área para fusilar a Oblak. Hubo cierta polémica en la acción de Gavi pero, en mi opinión personal, ese cuerpeo jamás puede ser suficiente para anular un gol. Como el propio Comité de Árbitros aseguró, «hay ciertas acciones para las que se necesita un poquito más», y por supuesto anular un gol es una de ellas. Con esto me refiero a que esa misma acción cerca del córner igual se podría haber pitado, pero nunca es suficiente para anular un gol. Pero quedémonos con lo de Pedri porque fue maravilloso.
Con el gancho a la mandíbula, el Atleti supo reaccionar y comenzó un periodo de dominio que prácticamente duró hasta el final del partido. Si bien no fue un asedio constante, el Barça sí tuvo que sufrir y, sobre todo, saber sufrir. Cumplió. Tuvo que ver como le presionaban alto y no era capaz de sacar el balón jugado, según Xavi, «abusando del pase de seguridad a Ter Stegen». También tuvo que ver algunas ocasiones claras en contra como el cabezazo de Giménez que se marchó por poco o el remate de Griezmann que saca Araújo bajo palos. No fue el partido ideal para ellos pero lograron el objetivo.
También me gustaría mencionar el papel de Dembélé, el mayor generador del Barça en ataque, de Ter Stegen, que mantuvo al equipo con vida con un par de paradas importantes -a pesar de algún error puntual-, y de la dupla Araújo-Christensen, que estuvieron ambos tremendos. Ah, y por supuesto lo de Ferran Torres y Savic, que no sé ni cómo abordarlo. Dudo si tacharlo de chiquillada o de estupidez directamente. Sin venir a cuento de nada se comieron ambos una roja y muy probablemente una sanción de 2-3 partidos por agresiones mutuas. Si bien no llegaron a los puños, se enzarzaron en una pelea de agarrones greco-romana que fue hasta difícil de entender. Lo único bueno que salió de esa secuencia de 30 segundos son los memes. En fin.
Superado uno de los campos más difíciles de LaLiga, el Barça encara la semifinal de la Supercopa de España ante el Batis, 4º en liga, antes de volver a la competición doméstica en la que logró un colchón de 3 puntos respecto al Madrid. Por su parte, el Atleti se queda a 14 puntos del líder y queda prácticamente fuera de la pelea por el título. Parece que lo que se venía diciendo se va a cumplir y esto será una liga de dos: Barcelona vs Real Madrid, el duelo infinito.
Imagen de cabecera: FC Barcelona
