Síguenos de cerca

Otros

Los deportistas que se fueron en 2016

El mundo del deporte lloró una de las peores tragedias de las últimas décadas con el accidente aéreo del Chapecoense, pero el año 2016 también será recordado por el adiós de dos leyendas como el púgil Muhammad Ali y el futbolista Johan Cruyff. El dominio y la bravuconería del primero y la visión revolucionaria del segundo marcaron a fuego la historia del boxeo y el fútbol en el siglo XX, siendo dos hombres que entraron en la categoría de «los mejores deportistas de la historia».

«Soy el más grande», repetía Ali cada vez que le acercaban un micrófono. ‘The Greatest’ murió el 3 de junio a los 74 años en un hospital de Phoenix tras varios días ingresado por problemas respiratorios. Además de los tres títulos de los pesados, Ali se consagró campeón olímpico en Roma 1960, cuando todavía se llamaba Cassius Clay, nombre que abandonó después de convertirse al islamismo. Dueño de un boxeo elegante, provocador y espectacular, Ali está considerado por muchos analistas como el mejor púgil de todos los tiempos y sus combates con Sonny Liston, Joe Frazier y George Foreman se convirtieron en un clásico. Además de sus exquisitos golpes, Ali fue un activo defensor de los derechos de las minorías en los Estados Unidos, lo que le valió más de una polémica.

Setenta y un días antes de que el mundo se inclinara ante Ali –«Fue más grande que su propia leyenda», dijo el expresidente estadounidense Bill Clinton-, el fútbol despedía a un hombre que transformó para siempre el juego. Cruyff, que falleció el 24 de marzo en Barcelona por un cáncer de pulmón, revolucionó el fútbol, primero como jugador y después como entrenador, pero siempre buscando la excelencia bajo una premisa clara: la pelota al servicio del espectáculo. Leyenda de Ajax de Ámsterdam, del Barcelona y de la selección holandesa, Cruyff tenía dos vicios. El balón, que lo convirtió en mito, y el tabaco, que acabó con su vida, una vida dedicada casi en su totalidad al fútbol. Ganó tres Balones de Oro y tres Copas de Europa con el Ajax antes de fichar por el Barcelona, donde se convirtió en un referente como entrenador del Dream Team, el primero en practicar el fútbol de toque que el equipo azulgrana ha convertido en marca de la casa.

El fútbol dijo adiós a otros grandes jugadores como el brasileño Carlos Alberto, capitán de la selección brasileña que fue campeona del mundo en 1970; el italiano Cesare Maldini, un mito del Milan; o el argentino Roberto Perfumo, uno de los mejores defensas de su país y ganador de la Copa Libertadores y la Intercontinental con Racing en 1967.

Una copa precisamente era lo que iba a buscar el Chapeocoense a Medellín cuando el avión que lo transportaba se estrelló por falta de combustible. Murieron 71 de los 77 pasajeros a bordo, entre ellos casi toda la plantilla del equipo brasileño, además de dirigentes y periodistas. La Conmebol declaró al ‘Chape’ ganador de la Copa Sudamericana, cuya final iba a disputar ante el Atlético Nacional de Colombia. Sólo tres futbolistas, Alan Ruschel, Hélio Neto y Jackson Follmann, sobrevivieron a la tragedia.

Otra víctima de la desgracia fue el piloto español de motos Luis Salom, que murió tras un accidente en un entrenamiento durante el Gran Premio de Cataluña. Sobre dos ruedas iba también el ciclista belga Antoine Demoitié cuando fue arrollado por una moto durante la clásica Gante-Wevelgem. Fue trasladado al hospital, pero murió. Horas después otro ciclista belga, Daan Myngheer, sufrió un ataque al corazón al comienzo del Critérium International en Córcega y perdió la vida. En los Juegos Paralímpicos murió otro ciclista, el iraní Bahman Golbarnezhad, que chocó con la cabeza contra un muro tras perder el control de su vehículo en un descenso.

Un accidente, en este caso marítimo, supuso el fin del pelotero cubano José Fernandez, que murió a los 25 años después de que su barco chocara contra un muelle en las costas de Florida. Era la estrella de los Miami Marlins. El mundo del deporte también despidió, entre otros, al legendario golfista Arnold Palmer, ganador de siete majors y a la gimnasta checa Vera Caslavska, siete veces campeona olímpica y cuatro mundial.

Comparte la notícia

No te lo pierdas

Más sobre Otros