Tonny Vilhena es uno de los jugadores más queridos por la afición de De Kuip. Así se lo demostró el fin de semana cuando todos iluminaban el estadio y cantaban a coro el famoso «You´ll never walk alone». Y es que Vilhena había perdido a su madre días atrás. La imagen pone el vello de punta. La cara más solidaria del fútbol. No todos los aficionados son hooligans.