El pasado verano, el Manchester United realizó una serie de incorporaciones de gran nombre e importancia en el fútbol mundial. Nombres rutilantes, mediáticos, como Radamel Falcao o Angel Di María, quienes fueron las principales llegadas a Old Trafford. Nuevas caras también fueron futbolistas como Ander Herrera, Luke Shaw y Marcos Rojo.
Una inversión elevada. Dentro de los casi 200 millones de libras que gastó el United en fichajes, tan sólo 14 fueron a parar a las arcas del Ajax por el que había sido el jugador del año en la Eredivisie, Daley Blind.
Blind resaltó en el mundial 2014 con la selección de su país, jugando como carrilero por banda izquierda, dejando detalles como la recordada y maravillosa asistencia a Robin van Persie ante España. Un combinado neerlandés entrenado por van Gaal, quien no dudó en ficharle para su nueva etapa en Inglaterra.
Llegó a Manchester tras su destacada actuación en Brasil, con la idea de ser un jugador complementario, con su perfil de buen asistente, con buen sentido táctico y polivalencia, lo cual le permitía a Louis van Gaal usarlo en distintas posiciones y mantener a su equipo equilibrado. Pero más allá de esto, nunca se esperó que fuera un jugador que tuviera una influencia mayúscula en el equipo.
En las últimas semanas, el Manchester United ha cosechado una racha de resultados positivos, a pesar de no tener el mejor rendimiento dentro de los terrenos de juego. Con la lesión de Michael Carrick, Blind ha tenido que ser el centrocampista de referencia en el equipo y su influencia ha sido notable.
Sus partidos ante QPR y Leicester son dos ejemplos perfectos. Ante el equipo de Nigel Pearson, Daley dio una asistencia a Van Persie y logró un porcentaje de efectividad de pases del 94%, completando 92 de 98 pases efectuados. El pasado fin de semana anotó sobre la bocina para darle un importante punto al Manchester United a domicilio, en Upton Park, frente West Ham.
Su liderazgo, calidad y visión de juego, lo han convertido en quizás el fichaje más importante para los Red Devils esta temporada, siendo constante y sin lograr los grandes focos mediáticos de las cámaras. Blind ha tenido una influencia superior a lo que se esperaba, mientras que figuras como Di María y Falcao todavía tienen mucho que probar tras lo invertido en ellos, demostrando que lo que cuesta un jugador no necesariamente es reflejo de lo que pueden aportar o influir en un equipo. Blind es uno de los nuevos líderes de este Manchester United post-Ferguson.
