Cesc Fàbregas al Como es uno de los fichajes más random en la historia del calciomercato italiano, comparable en el paso reciente, a cuando el Benevento se aseguró las prestaciones del francés Bacary Sagna en 2018.
El ex campeón del Mundo con España en 2010 fue presentado por la sociedad lombarda y representa inevitablemente, no tan solo el jugador de mayor pedigree y mayor impacto mediático en vestir la camiseta de la squadra lariana (más que Dirceu), sino también una pieza que dará mucho más caché a la Serie B.
¿Cómo ha sido posible que el Como haya podido hacerse con los servicios del centrocampista catalán?
Para comprender mejor este punto es necesario echar la vista atrás, partiendo como base de las últimas temporadas de Cesc, con más sombras que luces, y vinculando este desempeño a las ambiciones del Como y su propiedad.
En 2014 Fàbregas decide salir del Barça, club donde se formó y al que regresó en 2011 tras abandonar la Ciudad Condal con tan solo 16 años con destino a un Arsenal en el que sin duda alguna dejó su mejor fútbol bajo las órdenes de Arsène Wenger.
Una de las principales causas de su salida de Can Barça, fue la innegable falta de apoyo de una afición, la cual, quizás ya quedó en parte decepcionada tras su primera salida rumbo a Londres y que nunca le perdonó su bajo rendimiento bajo el mando de Pep Guardiola primero y Tito Vilanova después. Muchos ya consideraron en su día que pagar 40 millones de euros por la directiva de Sandro Rosell para ‘repatriar’ al hijo pródigo de la capital británica era una cantidad excesiva. Su rendimiento como culé le dio la razón a los más escépticos.
Su presencia en el campo creó en muchos momento un quebradero de cabeza táctico, al tener que cohabitar con Xavi, Iniesta y Messi. Así pues, no resultó muy difícil que en 2014 Jose Mourinho convenciera a Cesc para regresar a Londres, esta vez con la camiseta del Chelsea.
Con los Blues, Fàbregas se convierte en el futbolista español con más presencias en la Premier League (350) y conquista dos campeonatos de Premier, el primero con Mou y el segunda con Conte, además de una Copa de la Liga y una FA Cup. La llegada de Maurizio Sarri lo desplaza a un rol mucho más secundario, toda vez que el técnico italiano prefiere a los Jorginho, Kanté e incluso a Barkley.
Así, con 32 años. Cesc deja nuevamente Inglaterra y esta vez aterriza en el Principado de Mónaco donde le esperará Thierry Henry, técnico en ese momento del equipo monegasco. Sin embargo, el Mónaco al que llega Fàbregas es un club en lucha constante por encontrar una referencia técnica y táctica estable.
Además de la inestabilidad de su nuevo club, el rendimiento de Fàbregas en la Costa Azul quedó ciertamente limitado por las lesiones. Sin ir más lejos, en la pasada temporada solo pudo participar en 6 partidos, en lo que según palabras del propio Cesc fue la peor temporada de su vida deportiva.
Con la finalización del contrato los destinos de Cesc y el Mónaco se separan tras tres años y medio de convivencia.
A pesar de la oferta de la UD Las Palmas, que permitiría a Cesc volver a España, el catalán decide aceptar la propuesta de su buen amigo, Denis Wise (célebre ex jugador del Chelsea) quien es actualmente el administrador único del Como.
El club es de una sociedad inglesa, con CEO estadounidense pero con dos hermanos indonesios a la cabeza: Robert e Michael Hartono. El patrimonio de los Hartono deja al Como como una de las sociedades potencialmente más ricas del mundo.
La llegada de esta empresa a Como, famosa por su belleza y su lago, ha permitido al club regresar de la Serie D a la Serie B y poder aspirar con argumentos sólidos a soñar con volver a la Serie A, categoría que no pisa desde la temporada 2002-03.
¿Cómo podrá integrarse Fàbregas en el esquema de Giacomo Gattuso, entrenador del Como?
La temporada pasada el entrenador nacido en Como en 1968 (54 años), tras un comienzo lento donde firma 3 empates y otras tantas derrotas, consiguió que el equipo lograra una cómoda salvación, cerrando el campeonato de Serie B en la decimocuarta plaza.
Intentando aprovechar el trabajo de delanteros experimentados como Antonino La Gumina (9 goles marcados) y Alberto Cerri (10), Gattuso construyó un equipo muy reactivo, último por desnivel de campo (37,47%) build-up disruption (-5.95), que tenía en el 4-4-2 su esquema tipo.
Durante la fase de posesión, el conjunto lombardo tendía a subir la altura de los jugadores de banda, formando una primera línea con cuatro elementos. La idea era abrirse paso por un lado a través de combinaciones y, en el caso de un lateral cerrado, cambiar rápidamente el frente ofensivo.
Las bandas jugaron un papel importante en esta construcción, no solo para eventualmente buscar centros sino también para generar combinaciones ofensivas: el Como fue el equipo del torneo que ha producido el mayor número de third pass (37)
En fase defensiva tendían a defenderse con un bloque medio o bajo en tres líneas.
La llegada de Fàbregas podría obligar a Gattuso a mutar el escenario táctico de su equipo. Una solución podría ser la de desplegar al ex azulgrana como trequartista, un número 10 clásico jugando a la espalda de un delantero centro. Desde esta posición, Cesc podría desencadenar no solo los pases en profundidad a Cerri o La Gumina, sino también a los jugadores de banda.
Una alternativa que se vislumbra en estas horas es aquella en la que Cesc forme en un 4-3-3 como interior. Una posición que el español puede desempeñar sin problema y que podría conducir a Gattuso a descubrir nuevas vertientes en su modelo de juego.
Difícil, aunque no imposible, volver a ver a Fàbregas como falso nueve.
Dicho esto, la llegada de Fàbregas seguro que enciende nuevos focos en la Serie B, que se suman a los que ya existían por la presencia de grandes clubes. Para Fàbregas, la elección de Como, más allá de las ambiciones declaradas de querer devolver la squadra a la Serie A, también estuvo motivada por el hecho de estar totalmente implicado en el proyecto empresarial, habiendo comprado acciones del club.
La perspectiva de poder vivir en el lago de Como no deja indiferente a muchos. La gran pregunta en cambio se refiere a su condición física. “Llevo un par de meses entrenando solo, pero he firmado aquí dos años y no una semana ni 15 días. Si estoy listo en seis días para el partido de la Coppa Italia, bien, de lo contrario, será para el próximo. Físicamente estoy bien y esto es importante», fueron las primeras declaraciones del jugador al respecto.
El mejor escenario es el de ver a un Fàbregas ‘rehabilitado’, hasta el punto de iluminar con su juego un torneo que en los últimos años no ha brillado excesivamente por su nivel técnico, y pueda así liderar a su equipo al menos a los playoff de ascenso, y quizás soñar con el ascenso a Serie A 20 años después.
El peor escenario en cambio es aquel en que Cesc lucha sin éxito por ponerse en forma, subsanando un puñado de apariciones que no sirven para salvar el banquillo de su entrenador en un equipo que navega por debajo de las expectativas.
El terreno de juego dictará sentencia…
(Datos vía soccerment, Sics)
Fotografías: Twitter oficial del Como
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