Enrique JULIÁN GÓMEZ – Después del pistoletazo de salida ayer con la contrarreloj por equipos en Jerez, sin salir de tierras gaditanas se disputó la primera etapa en línea de la Vuelta a España 2014. Partiendo desde Algeciras, y tras superar al inicio el primer y único puerto del día, que permitió a Nathan Haas hacerse con el maillot de la montaña, el pelotón recorrió la costa gaditana pasando por los principales puntos turísticos de sol y playa de la región (Tarifa, Zahara de los Atunes, Barbate, El Puerto de Santa María) hasta llegar a la meta en San Fernando, previo paso por la capital Cádiz.
También se formó la tradicional escapada del día, la primera de la carrera. Un habitual, Javier Aramendia, hombre-fuga en las últimas dos ediciones de la Vuelta, estaba presente. Junto al de Caja Rural rodaron durante toda la jornada el veloz sudafricano Van Rensburg, el francés Hardy y el italiano Valerio Conti. Este último, que además consiguió el insulso maillot de la combinada, neoprofesional y debutante de solo 21 años, participa curiosamente con el dorsal 1, al sustituir a última hora a Chris Horner, vencedor de la carrera en 2013, que no pudo tomar la salida por sus bajos niveles de cortisol.
Más allá de anécdotas, el día fue tedioso, especialmente el -televisado- tramo final. Con la fuga perfectamente controlada, se rodó bajo un importante calor en plena autovía, sin ningún tipo de aliciente en el amarillento paisaje. Solo a tres kilómetros de meta se animó la carrera, en la preparación del sprint.
El equipo FDJ enseguida tomó el mando, y llevó en volandas a Nacer Bouhanni a la victoria. El francés, que ya ganó con suficiencia tres etapas en el Giro, consiguió su primer triunfo en España con enorme superioridad. Su último lanzador le dejó ya con una ventaja importante para ganar, e incluso le dio tiempo a girar la cabeza antes de meta y observar como la remontada de John Degenkolb era inútil. Por detrás iban llegando Ferrari, Stuyven , Lasca o Gatto.
Hubo cambio de líder a causa del puestómetro. Empatados a tiempo, y pese a que no era la intención del equipo, Alejandro Valverde 'arrebató' el maillot rojo a su compañero Jonathan Castroviejo. Mañana, tercera etapa de la Vuelta, sin salir de la provincia de Cádiz. Habrá cuatro puertos de tercera categoría, dos de ellos en el último tercio, que no deberían evitar la llegada del pelotón a Arcos de la Frontera. Cuidado, porque el último kilómetro y medio es un repecho que puede seleccionar el sprint.
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