Madrid – En el fútbol, al igual que en la vida, muchas veces es mejor ser afortunado que ser bueno. El Atleti no jugó bien, nunca pudo hacerse con el balón pero supo aprovechar el único error defensivo que cometió la Juventus y, con un gol de Arda Turan en el minuto 75 tras un quirúrgico centro de Juanfran se lleva los tres puntos para dejar el grupo A en un perfecto equilibrio.
Dejó bastante que desear el gran partido del miércoles de la segunda jornada de Champions League. En cierto modo fue decepcionante. Más respeto que osadía. Más guardar que ofrecer. La Juventus tuvo la posesión de principio a fin, con picos sonrojantes que llegaron a tocar el 28-72%, y fue entonces cuando el Atlético quiso hacer el partido desde el plano físico, para romper la fluidez del juego visitante y buscar el balón parado como gran recurso. El resultado no refleja lo visto en el campo, donde las tablas se antojaban justas, pero a los colchoneros sólo le servía la victoria y la han logrado con un zarpazo del mago otomano.
En el primer tiempo, la Juventus hizo suyo el partido con una posesión tan abrumadora como estéril, pero no fue hasta la media hora que mostró alguna acción interesante en ataque, una de ellas un disparo de Paul Pogba desde la frontal del área que salió desviado. El Atleti, por su parte, le tocó el incómodo rol de buscar robar el balón para acercarse a la portería bianconera y en un par de robos sobre los tres cuartos de cancha, logró crear peligro, ambas con Mandzukic: una salvada providencialmente por Vidal y otra con Buffon que despejaba con los puños.
Para el complemento, el Atleti tuvo unos primeros minutos buenos pero luego se volvió a la superioridad de la Juventus con el balón. No era un partido de grandes ocasiones y los de Simeone buscaban sobre todo los tiros libres para romper el equilibrio. Sin embargo, el gol llegó en el único error defensivo que cometió la Juventus.
Juanfran aprovecha un balón filtrado de Koke para servir a Arda Turan que anota el único tanto del partido. Error o ingeniudad, el Atleti es maestro en sacar provecho de estas situaciones y lo hizo justo en el momento en que mejor estaban los italianos.
También en virtud de la victoria del Malmö (2-0) ante el Olympiacos, los tres puntos aprovechando la condición de local era una oportunidad de oro para un Atleti agobiado de recuperar el terreno perdido en la primera jornada. No se avergonzó por defender el resultado con nueve hombres detrás de la línea del balón y provocando faltas tácticas para hacer correr al tiempo. La urgencia mandaba.
Comienza desde cero el grupo A, el Atleti con la obligación de centrar los seis puntos con el Malmö para no poner en riego la clasificación. La Juventus tendrá el doble enfrentamiento contra el Olympiacos con la ventaja de haber jugado ya en casa de su rival directo. Todo abierto. Poco fútbol.
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