Según ‘The Telegraph’, la International Board (IFAB) habría autorizado el uso paulatino de la tarjeta azul en el fútbol. Dicha tarjeta se usaría para situaciones de faltas tácticas que corten un ataque prometedor o por criticar al colegiado. El castigo aparejado a ver dicha tarjeta sería la expulsión durante 10 minutos.
Hay serias dudas que dicha medida vaya a implementarse en las principales competiciones a corto plazo, y es que el fútbol ya es complejo con dos tarjetas como para añadir una tercera.
Dicho esto, ojalá tener una tarjeta así para mostrar en nuestro día a día a los contactos y círculo cercano de nuestro entorno. Esta tarjeta no deja de ser un “te envío al rincón de pensar a que recapacites”. 10 minutos puede no parecer mucho, pero es tiempo suficiente para reflexionar y evitar males mayores.
¿Quién no tiene a gente cerca a la que desearía haberle mostrado una tarjeta así en su momento? La de lloros, malas decisiones, dramas y situaciones tóxicas que se hubieran evitado.
Volviendo al fútbol, bastante han ensuciado ya este bello deporte, desde dentro y desde fuera, como para que ahora vengan desde la IFAB y se pongan creativos.
No desnaturalicen más este juego, hagan el favor. El fútbol es algo demasiado serio y merece ser tratado con respeto. La tarjeta azul para el ‘Uno’. No corrompamos más la esencia de este deporte, ya que se corre el serio riesgo que cuando queramos echar la vista atrás ya sea demasiado tarde.
